Las marcas de lujo ocultan un turbio secreto: ¿Queman ropa por impuestos y exclusividad?

¿Estás buscando darte un capricho en el Buen Fin 2024? Las marcas de lujo esconden un secreto poco conocido. Te explicamos por qué queman ropa y artículos exclusivos en lugar de ofrecer descuentos.

Según un análisis de mercado de Equativ, el sector del lujo en México está en auge, impulsado por los nómadas digitales que se trasladan al país. Con un valor estimado de 31.600 millones de dólares en 2023, se prevé que supere los 50.000 millones en 2032.

Un oscuro secreto en la industria del lujo

Aunque la industria del lujo es conocida por su exclusividad, algunas prácticas ocultas, como la quema de productos, han generado controversia. Marcas como Burberry, Cartier, Montblanc y Louis Vuitton han sido señaladas por destruir ropa, accesorios y perfumes de temporadas pasadas.

En 2018, Burberry destruyó productos por valor de 40 millones de dólares para evitar su depreciación en los outlets o, peor aún, en las ventas con descuento.

Esta práctica tiene como objetivo proteger la percepción de exclusividad y evitar que la marca pierda prestigio. Cuanto más exclusivo y limitado sea un producto, mayor será su valor.

Las críticas de consumidores y organizaciones ecologistas han condenado la quema de artículos de lujo no vendidos. Greenpeace califica esta práctica como "un oscuro y sucio secreto de la industria de la moda".

Otras marcas involucradas

Además de Chanel y Burberry, otras marcas han admitido quemar productos. Entre ellas se encuentran:

Presiones y alternativas

Las marcas se enfrentan a la presión de mantener la exclusividad y evitar que sus productos se vendan en mercados de descuento. Algunas exploran opciones más ecológicas, como donaciones o reciclaje.

Sin embargo, tras las críticas recibidas, las marcas han reducido la destrucción de productos. Además, la ONU ha publicado la "Carta de Acción Climática de la Industria de la Moda", que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.

Conclusión

Las marcas de lujo recurren a prácticas controvertidas para mantener su imagen de exclusividad. La quema de productos no vendidos ha generado críticas y ha llevado a algunas marcas a explorar alternativas más sostenibles.