El PP impide la investigación de los 'protocolos de la vergüenza' en las residencias de Madrid

El PP impide que un investigador demuestre los «protocolos de la vergüenza» en las residencias de Madrid El Partido Popular de la Comunidad de Madrid ha impedido este miércoles, con su mayoría absoluta, que el investigador canadiense François Béland comparezca en la Asamblea de Madrid para explicar su estudio sobre los «protocolos de la vergüenza» en las residencias de mayores durante la primera ola de la pandemia, que concluye que el 7 de marzo de 2020 comenzó un triaje que impidió que los ancianos fueran atendidos en los hospitales. Comparecencia vetada El PP ha rechazado la petición de Más Madrid de que François Béland comparezca el próximo lunes ante la comisión de Familia y Asuntos Sociales, y ha vetado también la intervención de un representante de la Asociación Estatal de Directoras y Gerentes de Servicios Sociales. Estas decisiones ponen de manifiesto que la muerte de 7.291 ancianos en las residencias de Madrid durante la pandemia sigue siendo una herida abierta y que el PP no quiere que se hable de ello. Censura y veto ideológico «Hay un veto ideológico todo el rato», denuncia Emilia Sánchez-Pantoja, portavoz de Más Madrid. «No quieren que se hable de este tema», añade, y asegura que el PP «se pone muy nervioso cada vez que queremos hablar de lo que sea que tenga que ver con residencias». La diputada lamenta que «en ningún otro Parlamento pasan estas cosas». El PP argumenta que el tema ya ha sido debatido recientemente y que, por lo tanto, no es necesario volver a tratarlo. Sin embargo, la oposición considera que se trata de un asunto de suma importancia que no puede ser silenciado. Antecedentes de censura Esta no es la primera vez que el PP de Madrid impide que se hable de las muertes en las residencias durante la pandemia. En febrero, una representante de Amnistía Internacional denunció en la Asamblea de Madrid que en las residencias se habían documentado «violaciones de derechos humanos» y criticó la «discriminación en bloque» que supuso el veto a los traslados a hospitales. En marzo, el presidente de la comisión de familia impidió que una portavoz de la Asociación para los Derechos de los Mayores hablara sobre las muertes en las residencias. En mayo, el PP anunció que impediría que la Asamblea de Madrid escuchara a los integrantes de la comisión ciudadana que concluyó que se podrían haber evitado hasta 4.000 muertes de ancianos en las residencias. Y en junio, la Mesa de la comisión de Familia y Asuntos Sociales rechazó que interviniera en el Parlamento María Victoria Zunzunegui, convocada por Más Madrid como experta en epidemiología y geriatría. Silencio cómplice El rechazo del PP a hablar sobre lo ocurrido en las residencias durante la pandemia es un intento de silenciar un escándalo que pone en entredicho la gestión de la crisis sanitaria por parte de la Comunidad de Madrid. El partido liderado por Isabel Díaz Ayuso considera que este asunto es «un asunto del pasado», incompatible con el trabajo parlamentario, pero la oposición denuncia que se trata de una cuestión de actualidad que no puede ser ignorada. «La muerte de 7.291 ancianos en las residencias de Madrid no puede quedar impune», afirma Lorena Morales, portavoz del PSOE en la comisión de Familia y Asuntos Sociales. «El PP tiene que rendir cuentas por su gestión de la pandemia y por su intento de ocultar la verdad», concluye.