El PSOE se enfrenta a un congreso marcado por los escándalos
El Partido Socialista Obrero Español (PSOE) inicia este viernes en Sevilla su 41º Congreso Federal, una cita que, previsiblemente, no traerá grandes cambios en los cuadros, pero que llega en un momento complicado para los socialistas, en medio de escándalos como el caso Koldo, las acusaciones contra la esposa y el hermano de Pedro Sánchez o la dimisión del líder socialista de Madrid, Juan Lobato, en relación con el escándalo del fraude fiscal del novio de Isabel Díaz Ayuso.
El ya descabalgado líder socialista se encuentra en estos momentos en el Tribunal Supremo para declarar en el caso abierto por la revelación de secretos sobre el expediente fiscal de Alberto González Amador.
En relación con el caso de Begoña Gómez, este viernes también está citada a declarar en la comisión de investigación del Senado Cristina Álvarez, empleada de Moncloa que, supuestamente, medió para conseguir fondos para la cátedra de Begoña Gómez.
Además, en el día en que se cumple un mes de la dana que arrasó la provincia de Valencia, Pedro Sánchez presidirá la reunión del Comité de Crisis de la dana en Moncloa.
Los socialistas, “tranquilos” ante la declaración de Lobato en el Supremo
La vocal del Comité Organizador del 41º Congreso Federal del PSOE, Enma López, ha asegurado que los socialistas están “tranquilos” ante la declaración del exsecretario general del PSOE-M Juan Lobato este viernes en el Tribunal Supremo, que tiene lugar horas antes de que dé inicio en Sevilla el máximo órgano del partido.
“Estamos muy tranquilos. Y ahora, como hay una declaración judicial, lo único que queda es escuchar, pero estoy segura de que saldrá todo muy tranquilo”, ha asegurado la también portavoz socialista en el Ayuntamiento de Madrid en una entrevista en TVE, recogida por Europa Press. Al ser preguntada sobre si temen que Lobato pueda implicar de algún modo a La Moncloa en la filtración de un correo en el que la pareja de Isabel Díaz Ayuso confesó dos delitos fiscales, ha sostenido que tienen cero preocupación, insistiendo en que no están nerviosos.
López ha hecho hincapié en la necesidad de “hacer memoria” y recordar “cómo se ha llegado hasta aquí”, un asunto que empezó con la filtración por parte del jefe de Gabinete de Ayuso, Miguel Ángel Rodríguez, “de un correo electrónico que es mentira”. “Se desmiente ese bulo y eso nos ha traído a todos hasta aquí”, ha explicado, haciendo un llamamiento a “no perder ese foco”, el de “un escándalo más” de “los muchos que cercan” a la presidenta madrileña.
Lobato acude al Supremo para declarar como testigo en el caso de la filtración de los delitos fiscales del novio de Ayuso
Juan Lobato, líder del PSOE de Madrid hasta el pasado miércoles, ya ha llegado al Tribunal Supremo, donde está citado para declarar como testigo en la causa en la que se investigan al fiscal general del Estado. Lobato ha llegado a las 9.43, solo y caminando al alto tribunal, al que ha accedido sin hacer declaraciones a los numerosos medios de comunicación que le esperaban a la puerta.
El exdirigente socialista llevaba una carpeta del PSOE en la mano, presumiblemente con el acta que le ha solicitado el juez Ángel Hurtado de su registro ante notario de los menajes que intercambió en marzo con un cargo de La Moncloa, Pilar Sánchez Acera, en el que esta le enviaba un email perteneciente al caso que afecta a Alberto González Amador, pareja de la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso.
Lobato dimitió el miércoles como secretario general de los socialistas madrileños para, según dijo, poner “freno a una situación de enfrentamiento y división grave” que se estaba generando dentro del partido y denunciar un “linchamiento” por parte de sus compañeros.
La presión se hizo insoportable contra él cuando se conoció, el lunes, que la jefa de Gabinete de Óscar López cuando este era jefe de Gabinete de Pedro Sánchez le envió el correo electrónico de la pareja de Ayuso, para que lo usase en la Asamblea. Lobato acudió a un notario para certificar la conversación de WhatsApp que mantuvo con la jefa de gabinete de Óscar López.
En todo caso, al saberse de esa conversación, el instructor del Supremo Ángel Hurtado le citó como testigo porque su declaración puede ayudar al esclarecimiento de los hechos que se investigan contra García Ortiz y la filtración del correo a la prensa.
Lobato deberá aportar copia del acta que firmó ante notario sobre los mensajes intercambiados con la jefa de gabinete de López, una prueba que se antoja clave para saber cómo Moncloa accedió al correo que se investiga, si por su publicación en medios, como Lobato ha defendido hasta la fecha, o por otras vías.
Lobato acude como testigo, pero en función del contenido de esos mensajes, podría salir como investigado por un delito de revelación de secretos o, incluso, el juez podría acordar nuevas citaciones que podrían escalar hasta Pedro Sánchez.
El 41º Congreso Federal del PSOE, un acto de resistencia colectiva
La sucesión de decisiones judiciales y las acusaciones sin pruebas de corrupción vertidas por Víctor de Aldama han convertido el 41º Congreso Federal en un acto de resistencia colectiva. Y de respiración contenida a la espera de la declaración de Juan Lobato en el Tribunal Supremo por la filtración de los correos del novio de Isabel Díaz Ayuso tras conocerse que hace unas semanas había registrado ante notario la conversación sobre el caso que mantuvo en marzo con Pilar Sánchez Acera, en ese momento jefa de gabinete en La Moncloa de Óscar López, a su vez director de gabinete del presidente hasta que en septiembre fue nombrado ministro.
El exsecretario general de la federación madrileña fue citado el lunes para declarar este viernes, una celeridad que ha hecho que coincida justo con el día que arranca el congreso socialista. En el Gobierno insisten que están tranquilos y no tienen nada que ocultar porque, argumentan, el intercambio de mensajes entre Lobato y Sánchez Acera no contienen nada que les comprometa.
De la pandemia a la polarización
La víspera de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, me llamó la atención un titular de The New York Times que decía: “Detrás de la ira electoral podría haber algo más: el duelo persistente por la covid”. Explican los autores que “la pandemia trajo un dolor inmenso por la muerte de seres queridos, los funerales de amigos y las celebraciones perdidas. Hubo enormes consecuencias económicas y sociales para todos”.
Los jóvenes no tendrán una segunda oportunidad “para los años de la secundaria o la universidad arruinados por la crisis”. La reverenda Amy Greene, directora de cuidado espiritual de la Cleveland Clinic, un centro médico académico sin ánimo de lucro, sugiere que “gran parte de la rabia, la angustia y la animosidad” que prevalece en la población en este momento es “un duelo no procesado”.