El sueño profundo: mucho más que descanso

Dormir profundamente no solo nos permite descansar, sino que también ayuda a "limpiar" nuestra mente, literalmente. Así lo revela un reciente estudio que demuestra cómo el sueño profundo puede eliminar los residuos acumulados en el cerebro durante el día, un proceso crucial para mantener la salud cerebral.

El sistema de "lavado" del cerebro

Los científicos saben que el cerebro tiene un sistema de eliminación de desechos incorporado, llamado sistema glinfático, que hace circular líquido por el cerebro y la médula espinal para eliminar los residuos. Este proceso ayuda a eliminar las proteínas tóxicas que forman placas pegajosas relacionadas con trastornos neurológicos.

Sin embargo, hasta ahora no estaba claro qué impulsaba este sistema. Un equipo de científicos daneses descubrió que una molécula llamada norepinefrina desempeña un papel clave en la limpieza del cerebro en ratones.

La norepinefrina, el director de orquesta del cerebro

Durante el sueño profundo, el tronco encefálico libera pequeñas oleadas de norepinefrina aproximadamente cada 50 segundos. Esta molécula contrae los vasos sanguíneos, generando pulsaciones lentas que crean un flujo rítmico en el líquido circundante para arrastrar los desechos.

Los investigadores compararon los cambios en el volumen sanguíneo con el flujo de fluido cerebral y observaron que ambos fluctuaban en correspondencia, lo que sugiere que los vasos sanguíneos actúan como bombas para impulsar el fluido cerebral circundante y eliminar los desechos.

"La norepinefrina es como el director de orquesta", explica Natalie Hauglund, autora principal del estudio de la Universidad de Copenhague y la Universidad de Oxford. "Hay una armonía en la constricción y dilatación de las arterias, que luego impulsa el líquido cefalorraquídeo a través del cerebro para eliminar los productos de desecho".

Los somníferos y la limpieza del cerebro

¿Pero todos los sueños son iguales? Para averiguarlo, los investigadores administraron a ratones zolpidem, un fármaco habitual para conciliar el sueño. Descubrieron que las ondas de norepinefrina durante el sueño profundo eran un 50 % menores en los ratones tratados con zolpidem que en los que dormían de forma natural.

Aunque los ratones tratados con zolpidem se dormían más rápido, el transporte de fluidos al cerebro disminuía más de un 30 %. Los resultados sugieren que los somníferos pueden alterar la eliminación de residuos impulsada por la norepinefrina durante el sueño.

"Cada vez más gente utiliza medicación para dormir, y es muy importante saber si se trata de un sueño saludable", advierte Hauglund.

Implicaciones para los seres humanos

El equipo cree que es probable que los hallazgos se apliquen a los humanos, que también tienen un sistema glinfático, aunque para confirmarlo hacen falta más pruebas. Los investigadores han observado ondas de norepinefrina, patrones de flujo sanguíneo y flujos de líquido cerebral similares en humanos.

Estos hallazgos pueden ayudar a comprender cómo un sueño deficiente puede contribuir a trastornos neurológicos como la enfermedad de Alzheimer. "Ahora que sabemos que la norepinefrina impulsa la limpieza del cerebro, podemos averiguar cómo conseguir que la gente tenga un sueño largo y reparador", concluye Maiken Nedergaard, autora principal del estudio de la Universidad de Rochester y la Universidad de Copenhague.