La Fundación Antoni de Montpalau, fundada para recopilar tejidos modernistas y art déco, atesora ahora una impresionante colección de más de 19.000 vestidos de lujo, muchos de ellos donados por familias adineradas de la sociedad catalana.

El exclusivo vestidor de la realeza

El último préstamo de la fundación, dos piezas de Cristóbal Balenciaga que lució la reina Letizia para un retrato de Annie Leibovitz, ha puesto de manifiesto el extraordinario valor de su colección. El vestido negro y la capa frambuesa, diseñados a medida para la boda de Juan Carlos y Sofía en 1962, son un testimonio de la maestría de Balenciaga y de la importancia histórica de la fundación.

Un tesoro de la moda española

La colección de la fundación abarca creaciones de renombrados diseñadores españoles como Pertegaz, Pedro Rodríguez y Sybilla, así como de diseñadores internacionales como Givenchy, Valentino y Jean Paul Gaultier. La fundación ha organizado 25 exposiciones y publicado varios libros, contribuyendo a la difusión de la historia y el patrimonio de la moda española.

El compromiso de la Casa Real

El préstamo de los vestidos de Balenciaga a la Casa Real es un reconocimiento al trabajo de la fundación. La Casa Real se ha comprometido a reconocer públicamente la labor de la fundación, que cumple 20 años en diciembre.

El protagonismo del vestido negro

Aunque la capa frambuesa es una pieza históricamente significativa, ha sido el vestido negro el que ha acaparado la atención en el retrato de Leibovitz. La reina Letizia y su estilista optaron por combinar el vestido con la capa, creando un conjunto elegante y atemporal.

El papel de Annie Leibovitz

La decisión de Leibovitz de que la reina llevara la capa caída hasta los antebrazos ha restado protagonismo a la pieza. Sin embargo, la fotógrafa ha sabido capturar el glamour y la elegancia de la reina, que luce radiante con el conjunto de Balenciaga.

Un vestidor de ensueño

La Fundación Antoni de Montpalau alberga un vestidor de ensueño, lleno de piezas únicas y valiosas. El préstamo a la Casa Real es un testimonio de la importancia de la fundación en la preservación del patrimonio de la moda española y en la promoción de su legado cultural.