El Gobierno argentino devuelve a Defensa el control de dos bases antárticas
Las bases Carlini y Brown, en la Antártida, regresan a la gestión del Ministerio de Defensa, recuperando así su control administrativo y logístico. Esta decisión, anunciada por la canciller Diana Mondino, implica un retorno al esquema original de administración de las bases antárticas argentinas, que desde 2003 se encontraban bajo la órbita de la Cancillería.
Eficiencia y ahorro de recursos
El traspaso, acordado entre Mondino y el ministro de Defensa, Luis Petri, busca optimizar el gasto y ahorrar recursos al unificar el control administrativo de las 13 bases antárticas en el Ministerio de Defensa. Este cambio permitirá evitar duplicaciones en compras y contrataciones públicas.
Antecedentes de inconvenientes
La decisión de devolver el control de las bases antárticas a Defensa se produce tras conocerse serios inconvenientes de aprovisionamiento en la base Carlini, que llevaron a una situación de emergencia. Fallas en el mantenimiento dejaron sin servicio los generadores eléctricos, esenciales para la calefacción y el bombeo de agua potable.
Reacciones y nombramientos
Patricia Ortuzar, entonces titular de la Dirección Nacional del Antártico (DNA), presentó su renuncia tras trascender el acuerdo entre los ministros. Actualmente, la diplomática Cynthia Hotton asume como directora a cargo de la DNA, y deberá reasignar al personal que antes se ocupaba de compras y licitaciones.
Reunión internacional en el Palacio San Martín
El Palacio San Martín, sede de la Cancillería argentina, acoge esta semana la 36ª Reunión General Anual del Consejo de Gerentes (COMNAP), organismo internacional que reúne a los países firmantes del Tratado Antártico. En esta reunión se intercambian información sobre la próxima temporada de investigación antártica, la modernización de infraestructuras y los desafíos que plantea el creciente turismo en la Antártida.
Hito estratégico en la base Petrel
Argentina avanza en la renovación de la pista de aterrizaje de la base Petrel, un hito estratégico para el país. Actualmente, cerca del 51% de los países firmantes del Tratado Antártico acceden al continente blanco a través de Chile y Argentina (Ushuaia), tanto por vía aérea como marítima. La renovación de la pista de Petrel mejorará las operaciones y permitirá aterrizajes de aeronaves de mayor tamaño.