La presidenta de Extremadura, María Guardiola, ha dado un nuevo giro en su política sobre la memoria histórica tras anunciar que finalmente promoverá la Ley de Concordia exigida por Vox, una norma que derogaría la actual Ley de Memoria Histórica y Democrática de Extremadura.

Antecedentes

Tras las elecciones de 2023, Guardiola negoció un pacto de coalición con Vox que incluía la derogación de la Ley de Memoria Histórica. Sin embargo, dicho acuerdo saltó por los aires en julio de 2025 tras la salida de Vox de varios gobiernos autonómicos.

Guardiola congeló entonces la Ley de Concordia, pero tras prorrogar los presupuestos de 2024 a 2025 ante la negativa de Vox y del resto de partidos a apoyar las cuentas, ha cambiado de estrategia.

Cambio de rumbo

La decisión de Guardiola ha sido avalada por la dirección nacional del PP, que considera que "todo lo que suena a concordia suena bien". El portavoz nacional del PP, Borja Sémper, ha destacado que la nueva estrategia tiene como objetivo obtener el apoyo de Vox para los presupuestos de 2025.

Reacciones

El anuncio de Guardiola ha generado reacciones encontradas. El ministro de Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres, ha censurado el "bandazo" de la presidenta extremeña, mientras que Miguel Tellado, portavoz parlamentario del PP, ha criticado al Gobierno por conmemorar el 50 aniversario de la muerte de Franco.

Contexto

El cambio de prioridades de Guardiola se produce en un momento en el que varios gobiernos autonómicos del PP dependen del apoyo de Vox para aprobar sus presupuestos. La formación de Santiago Abascal ha amenazado con no apoyar los presupuestos si el PP no se acerca a sus políticas migratorias.

La Ley de Concordia, que ahora se tramitará en Extremadura, derogaría la actual Ley de Memoria Histórica y Democrática de Extremadura, aprobada en 2018.