La auditoría interna del Consell de la República de Puigdemont desata una guerra interna

Presiones a auditor por informe sobre gastos indebidos

La entidad que busca promover la independencia de Cataluña desde el exterior, creada por Carles Puigdemont en 2018, enfrenta un conflicto interno a raíz de una auditoría que revela gastos personales por parte del exvicepresidente, Toni Comín, con fondos destinados a la ayuda a exiliados.

El autor de la auditoría, Miquel Verdaguer, denunció presiones verbales y escritas para modificar el contenido del informe, particularmente en lo que respecta a los gastos de Comín, quien aspira a presidir el Consell.

Gastos injustificados

La auditoría expuso gastos de Comín por alquiler de apartamento, alquiler de coche, retiros de efectivo, pago de impuestos y una multa, que suman más de 15.500 euros y no fueron aprobados por el Consejo de Administración del Consell.

El informe cuestionó la justificación de estos gastos dentro del marco de la defensa del exilio, ya que corresponden a un cargo electo con ingresos propios.

Rectificación y rebatiendo

Comín solicitó una revisión de la auditoría y Verdaguer admitió una lectura "incompleta", lo que llevó a Comín a declarar su inocencia.

Sin embargo, la Junta del Consell rebatió la postura de Comín, señalando que la aclaración técnica no modifica las conclusiones ni recomendaciones del informe.

Crisis y elecciones internas

La entidad atraviesa una crisis desde hace meses tras perder apoyo social y protagonismo político.

Puigdemont abandonó el Consell y la dirección dimitió, dejando el órgano en manos de una gestora que redujo la estructura por falta de fondos.

Próximamente, el Consell celebrará elecciones entre el 8 y 12 de febrero para definir su futuro.

"Hemos querido conocer el sentido estricto de la naturaleza del documento y el objetivo de la aclaración", señala la Junta en su comunicado.

Comentario de Valtònyc

En medio del conflicto, el rapero Valtònyc recomendó "alejar" a Comín de cualquier organización, afirmando que lo revelado en los medios es solo "la punta del iceberg".

No obstante, no presentó pruebas y posteriormente borró su mensaje.