Isabel Díaz Ayuso: una ilustre liberticida
Los servicios públicos son el pilar del Estado del bienestar, un pacto entre clases y una conquista de los trabajadores que ha logrado los mayores niveles de igualdad y bienestar social conocidos. La educación universitaria ha sido clave en el desarrollo de la clase media y el progreso de nuestra sociedad.
Sin embargo, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, está llevando a cabo una política que asfixia las universidades públicas madrileñas. Esta actitud liberticida atenta contra la libertad de las personas a acceder a una educación de calidad y a vivir una vida digna.
Según Ayuso, las universidades son un caldo de cultivo de la izquierda. Este argumento es absurdo y no se sostiene con datos. Las universidades son espacios de pluralismo y debate, donde se comparten ideas y se fomenta el pensamiento crítico. Son esenciales para el desarrollo de una sociedad democrática y libre.
La política de Ayuso no solo afecta a las universidades. También está recortando en sanidad, educación y cultura. Prefiere financiar los toros que invertir en servicios públicos esenciales para el bienestar de los ciudadanos.
La izquierda debe reconquistar la palabra "libertad". La libertad no es un concepto abstracto, sino que se concreta en derechos y oportunidades reales para las personas. La subida de los salarios, la reducción de la jornada laboral y la defensa de lo público son luchas inequívocas por la libertad.
Es necesario que salgamos a la calle y defendamos nuestros derechos. No podemos permitir que Ayuso y otros dirigentes políticos liberticidas destruyan nuestros servicios públicos y nuestra democracia.
"Los servicios públicos son el espinazo del Estado de bienestar. Ofrecen la libertad de decidir cómo vivir una vida digna sin sufrir la amenaza de la precariedad, la pobreza o el desastre vital."
Sergio C. Fanjul, periodista de El País
- La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, está llevando a cabo una política que asfixia las universidades públicas madrileñas.
- Esta actitud liberticida atenta contra la libertad de las personas a acceder a una educación de calidad y a vivir una vida digna.
- La izquierda debe reconquistar la palabra "libertad", que no es un concepto abstracto, sino que se concreta en derechos y oportunidades reales para las personas.
Fuente: El País