Junts y PSOE se vuelven a reunir en Suiza tras la amenaza de Puigdemont a Sánchez
Una delegación de negociadores del PSOE se reunió este viernes en Suiza con representantes de la cúpula de Junts per Catalunya, en el marco de las reuniones periódicas que ambos bandos vienen realizando desde hace un año como parte del acuerdo que firmaron en Bruselas en noviembre del 2023 para desbloquear la investidura de Pedro Sánchez.
En la reunión, avanzada por El Periódico, han estado Jordi Turull y Miriam Nogueras, por parte de la formación independentista. Ni Junts ni el PSOE facilitan información oficial de estos encuentros, pero es habitual que lideren Carles Puigdemont y Santos Cerdán al frente de sus equipos negociadores, de Junts y PSOE respectivamente. Puigdemont asumió el pasado mes de octubre la presidencia de Junts y Santos Cerdán es secretario de Organización del PSOE, además de formar parte del círculo de confianza del presidente Pedro Sánchez.
La reunión se produce en medio de la incertidumbre política que ha sembrado Junts esta semana, al arrojar dudas acerca de la relación que mantiene con el Gobierno. Puigdemont hizo una comparecencia pública el lunes para denunciar que Pedro Sánchez “no es de fiar”, y le echó en cara el incumplimiento de una serie de acuerdos alcanzados entre Junts y el PSOE.
Puigdemont criticó que el catalán sigue sin ser una lengua oficial en la Unión Europea, “el catalán no es lengua oficial de Europa por la falta de implicación de Pedro Sánchez”, dijo, al tiempo que criticó el enfoque que da el PSOE al diseño de un nuevo modelo de financiación para Cataluña: “consolida el café para todos”.
El PSOE defiende que se ha movido para sacar adelante la Ley de Amnistía, pero Puigdemont replica que él sigue sin poder entrar en España. Las trabas judiciales a la aplicación de la ley complican su regreso sin riesgo de ser detenido: “Una amnistía que no es completa no es amnistía”, critica el expresident.
Junts admite que las trabas son responsabilidad de los magistrados del Tribunal Supremo, pero el líder del partido culpa a Pedro Sánchez de ser “incapaz de hacer ni una declaración, ni una sola comparecencia para denunciar esta amenaza para la democracia”.
Tal y como adelantó EL PAÍS, el PSOE tenía intención de reconducir las relaciones con Junts a través de esta cita en Suiza, con el objetivo de lograr la aprobación de los Presupuestos. Pedro Sánchez incluso ha abierto la puerta a poder mantener una reunión con Puigdemont que, según fuentes del Gobierno, por ahora no está en la agenda.
Al abordar las citas en Suiza, las dos formaciones políticas se escudan en el secretismo alegando que la discreción fue una de las condiciones que pactaron hace un año al configurar un programa de reuniones, que se realizan bajo la supervisión de un verificador internacional, con el objetivo de mejorar el encaje de Cataluña en España.
Puigdemont avisó al Gobierno de que ha llegado la hora de enmendar el apoyo que presta Junts per Catalunya a Pedro Sánchez. “Las cosas no van bien”, señaló el pasado lunes el líder de la formación independentista en una comparecencia desde Bruselas, donde anunció que Junts había una proposición no de ley en el Congreso de los Diputados para pedir que Pedro Sánchez se someta a una cuestión de confianza.
“En Suiza las cosas van razonablemente bien, hay empatía, pero cuando llega la hora de concretar con un ministro parece que alguien no le ha pasado la información”, criticó el lunes Puigdemont, que remarcó que en esta situación es impensable un posible apoyo de Junts a los Presupuestos Generales de 2025 porque no se subsana el incumplimiento crónico de las inversiones en Cataluña.
Autor:
Marc Rovira (El País)