La Fiscalía sostiene que una testigo clave del \"caso niñera\" siente \"animadversión\" hacia Irene Montero

La Fiscalía exculpa a Podemos en el \"caso niñera\" al recalcar que una de las testigos clave en la causa abierta por el juez Juan José Escalonilla, que ha llevado a imputar a dos trabajadoras del partido por supuestamente ejercer como cuidadoras de los hijos de Irene Montero y Pablo Iglesias, demuestra una \"animadversión\" hacia la ministra de Igualdad.

Elena González, la testigo clave

El ministerio público se refiere así a Elena González, una exempleada despedida por la formación que declaró ante el magistrado el pasado mes de marzo, cuando afirmó que llevaba personalmente a una persona del equipo de prensa de Montero a su casa para realizar esas labores de cuidado.

La declaración de González supuso en su momento un revés para Podemos. Las pesquisas habían surgido como una derivada del \"caso Neurona\", la investigación abierta por la supuesta contratación irregular de la consultora mexicana Neurona por parte de Podemos para las elecciones generales de abril de 2019.

En el marco de esa causa, una exabogada del partido, Mónica Carmona, aseguró que Montero había recurrido a una de sus asesoras, María Teresa Arévalo -que, según la letrada, cobraba un sueldo del partido-, para cuidar a su hija menor, aún bebé, durante aquella campaña.

Por ello, el \"caso niñera\" se centró inicialmente en Arévalo, que negó las acusaciones, al igual que altos cargos de la formación.

También la propia Elena González, en su testimonio del pasado mes de marzo, negó ese extremo y afirmó que nunca había visto a Arévalo ejercer como niñera.

Gara S., la nueva imputada

Sin embargo, la declaración de Elena González introdujo un nuevo elemento: la exempleada señaló a Gara S., que trabajó en el equipo de prensa de Montero. Según detalla la Fiscalía en un escrito, fechado el pasado 12 de mayo y al que tuvo acceso EL PAÍS, la extrabajadora contó que \"otra persona iba a cuidar de los niños, que no era Teresa Arévalo\":

"La recogía personalmente, la llevaba por la mañana y luego se quedaba todo el día", aseguró González al juez, antes de añadir: \"Se encargaba de cuidar [a los menores] porque me lo contaba esa persona\".

No obstante, la testigo clave matizó que no sabía si acudía a ayudarla como parte de su jornada laboral o por simple amistad:

\"Eran muy amigas, siempre han tenido relación. Y luego, también al ser ella pareja sentimental de [el diputado] Rafa Mayoral...\"

Tras escuchar ese relato, el juez Escalonilla decidió imputar a Gara S. La Fiscalía no se ha opuesto a su declaración -que aún no se ha producido-, pero señala en su escrito la \"animadversión\" de González contra Montero y subraya que \"no es extraño que una amiga ayude a otra con dos recién nacidos, prematuros, recién salidos del hospital\":

\"Y que lo haga sin ser remunerada por ello\"

De hecho, el ministerio público añade que no es \"ilógico\" que, durante la baja de la actual ministra, se produjeran \"reuniones políticas en su domicilio, dada la posición que ocupaban tanto ella como Pablo Iglesias en el partido\":

\"El interés de la Fiscalía en exculpar a Podemos se demuestra en su escrito\" (Jiménez-Galvez, 2022)