La diabetes tipo 1 es una enfermedad hereditaria que se diagnostica con mayor frecuencia en niños y jóvenes. Aunque es menos común que la diabetes tipo 2, su diagnóstico es escaso debido al desconocimiento de la población y la falta de recursos para la detección y diagnóstico. El manejo adecuado de la enfermedad es crucial, ya que puede causar daño cerebral funcional y afectar el coeficiente intelectual, lo que aumenta la mortalidad. Afortunadamente, en países como Colombia y Perú, se tiene acceso a tratamientos innovadores como la insulina análoga y los sistemas de administración automatizada de insulina, lo que facilita el control de la enfermedad y evita complicaciones a corto y mediano plazo. Aun así, existen barreras que dificultan el acceso a estas tecnologías, como el conocimiento limitado de algunos especialistas y los retrasos administrativos en la atención médica. Es importante mejorar estas condiciones para reducir la incidencia de la diabetes en el futuro.

En Colombia, la diabetes tipo 1 representa entre el 5% y el 10% de los casos, y se estima que aproximadamente el 10% de la población tiene diabetes. A nivel latinoamericano, solo 12 países cuentan con las tecnologías básicas necesarias para el manejo efectivo de la diabetes. Por otro lado, en Perú se estima que 50 mil niños y adolescentes padecen de diabetes tipo 1, y menos del 1% de los pacientes tienen acceso a dispositivos de monitoreo continuo de glucosa. El uso de insulina humana como tratamiento no logra un manejo efectivo de la enfermedad. Sin embargo, existen soluciones avanzadas disponibles como los sistemas de administración automatizada de insulina, que permiten asegurar una dosificación más precisa y efectiva, evitando las hipoglucemias y reduciendo la cantidad de inyecciones necesarias.

El diagnóstico temprano de la diabetes tipo 1 es fundamental para evitar complicaciones graves como daño renal, ceguera y afectación del coeficiente intelectual. Es importante estar atentos a los síntomas como aumento excesivo de sed, pérdida repentina de peso, micción frecuente y falta de energía. Además, es necesario combatir los mitos y conceptos erróneos alrededor de la diabetes tipo 1, ya que esto dificulta el diagnóstico y tratamiento oportunos.

Para mejorar la atención de los pacientes con diabetes tipo 1, es necesario fortalecer la educación médica, mejorar las políticas públicas de salud y ampliar el acceso a medicamentos y tecnologías. En Colombia, el acceso a tratamientos innovadores está contemplado tanto en el régimen contributivo como en el régimen subsidiado de salud. En Perú, el programa Changing Diabetes® in Children brinda atención gratuita y tratamiento en centros especializados para diabetes tipo 1.