¿Puigdemont, el expresidente catalán, será detenido si regresa a España?

La investidura del próximo presidente de la Generalitat de Catalunya está en el aire debido a la ley de amnistía aprobada recientemente. Carles Puigdemont, expresidente catalán procesado por malversación agravada y terrorismo, no lo tiene fácil para optar a la investidura. El magistrado Pablo Llarena, instructor de la causa del procés, le ha dado cinco días a las partes para que se pronuncien sobre si los hechos que se le atribuyen a Puigdemont son amnistiables. Si Llarena no levanta la orden de detención, Puigdemont solo podrá regresar a España a sabiendas de que se expone a ser arrestado.

¿Está Llarena obligado a levantar la orden de detención?

La ley de amnistía establece que el órgano judicial que conozca una determinada causa vinculada al proceso independentista en Cataluña debe dejar sin efecto las órdenes de detención. Sin embargo, si Llarena llega a la conclusión de que los hechos investigados no quedan al abrigo de la amnistía, puede mantener en vigor esas órdenes. El juez aún no ha tomado una decisión, pero recuerda a los policías que deben cumplir las órdenes de detención hasta que se modifiquen o revoquen judicialmente.

¿Podría Puigdemont intentar la investidura a distancia?

No. El reglamento del Parlament no contempla la investidura telemática ni tampoco lo hace la Ley de Presidencia de la Generalitat. Tras las elecciones de 2017, los independentistas modificaron la norma para incluir la posibilidad de que la sesión de investidura se celebrara sin la presencia de Puigdemont, pero el Tribunal Constitucional declaró inconstitucional la reforma en 2019.

¿Puede el presidente del Parlament proponer a Puigdemont como candidato aunque tenga menos apoyos que Illa?

El reglamento del Parlament no establece un dilema de este tipo. La ley de la Presidencia de la Generalitat fija que el presidente de la Cámara catalana debe proponer a un candidato 10 días después de su constitución. El exletrado mayor del Parlament, Joan Ridao, afirma que un presidente debe constatar que un aspirante tenga ciertas posibilidades de alcanzar la investidura, pero no es necesario que tenga la certeza absoluta.

¿Puede llegar a celebrarse una sesión sin candidato?

Podría pasar. Ya ocurrió algo similar en 2020, tras la condena del expresidente Quim Torra. Con la ausencia de presidente para firmar el decreto de elecciones, fue Roger Torrent, entonces presidente del Parlament, quien activó el reloj de la investidura. Los letrados de la cámara propusieron dos vías: firmar una resolución equivalente a una investidura o convocar una sesión para decir que no había candidato. Torrent optó por la primera.

Las primeras decisiones del Tribunal Supremo sobre la aplicación de la ley de amnistía sugieren que Puigdemont difícilmente podría regresar a tiempo a Barcelona, ya que el límite para el primer debate de investidura es el 25 de junio. Si no se expone a ser detenido, Puigdemont solo podrá regresar a España sabiendo que se arriesga a ser arrestado.