¡Descubre la playa del Benijo, un oasis de paz en Tenerife!

España es famosa por sus impresionantes playas, pero encontrar un remanso de tranquilidad en medio del ajetreo turístico puede ser difícil. La playa del Benijo, en Tenerife, es una excepción a esta regla. Esta playa desierta ofrece un escenario idílico para aquellos que buscan escapar de las multitudes y disfrutar de la belleza natural.

Un paraíso apartado

Situada en el Parque Rural de Anaga, la playa del Benijo se caracteriza por su fina arena dorada y sus oscuras rocas volcánicas. Su entorno prístino, sin tiendas ni duchas, la convierte en el lugar perfecto para quienes buscan una experiencia playera auténtica y sin aglomeraciones.

Durante el mes de julio, la playa del Benijo suele estar casi desierta, lo que la convierte en un refugio ideal para aquellos que quieren escapar del calor y las multitudes. Sin embargo, para aquellos que quieran disfrutar de sus impresionantes puestas de sol, es esencial llegar temprano, ya que son consideradas unas de las más espectaculares de España.

Consejos para una visita inolvidable

Para llegar a la playa del Benijo, es necesario disponer de vehículo propio. Una vez allí, hay que realizar una breve caminata de unos 15 minutos hasta la playa. Es importante tener cuidado con la marea, ya que sus aguas pueden ser peligrosas.

Para disfrutar al máximo de la experiencia, se recomienda llevar comida y bebida, ya que no hay servicios disponibles en la playa. También es aconsejable llevar calzado cómodo para la caminata hasta la playa.

La playa del Benijo es un lugar único y especial que ofrece una escapada perfecta para los amantes de la naturaleza y los buscadores de tranquilidad. Su belleza virgen y su ambiente relajado hacen que sea un destino imprescindible para los viajeros que buscan un oasis de paz en las Canarias.