Los investigadores sugieren que las mujeres pueden experimentar atracción por personas del mismo sexo con mayor frecuencia de lo que manifiestan abiertamente, según un estudio publicado en The Journal of Sexual Medicine.
Atracción implícita y explícita
El estudio utilizó la Prueba de Asociación Implícita (IAT) y la Escala de Kinsey para analizar los datos de 491 mujeres de entre 18 y 65 años. Los resultados mostraron que, si bien el 80,4% de las participantes se identificaron como heterosexuales, el 67,8% exhibió preferencias ginefílicas implícitas (atracción por mujeres) y el 5,9% mostró preferencias androfílicas implícitas (atracción por hombres).
Atracción estética y preferencia sexual
El estudio también reveló que las mujeres a menudo califican a otras mujeres como más atractivas estéticamente, pero tienden a preferir a los hombres como parejas sexuales. Esto sugiere que las respuestas ginefílicas implícitas pueden surgir de una apreciación de la belleza femenina más que de una atracción sexual real.
Diferencias entre ginefilia y androfilia
El autor del estudio, Andrea S. Camperio Ciani, explica que, a diferencia de la androfilia en los hombres, la ginefilia en las mujeres no predice confiablemente la homosexualidad. En cambio, refleja una apreciación más amplia de la belleza femenina.
Fluidez sexual
Otros estudios, como el realizado por Lisa Diamond (2008), sugieren que para algunas mujeres, la atracción y el amor pueden ser fluidos y cambiar con el tiempo. Esto cuestiona la noción de orientación sexual rígida y apoya la idea de que los roles de género cambiantes y el progreso del feminismo pueden influir en la atracción de las mujeres por el mismo sexo.
"La ginefilia en las mujeres refleja una apreciación más amplia de la belleza femenina, no necesariamente una atracción sexual". - Andrea S. Camperio Ciani, Universidad de Padua