Velas escamadas: el arte efímero que ilumina las ofrendas monumentales
En Tochimilco, Puebla, la tradición de las "Velas Escamadas" se mantiene viva gracias a manos artesanas que moldean la cera con delicadeza, creando adornos que asemejan escamas de pescado.
Doña Arcelia Flores, junto a su hermana Rubicela, lleva 25 años elaborando estas velas que son imprescindibles en las ofrendas del Día de Muertos. El proceso, aunque aparentemente sencillo, requiere paciencia, precisión y horas de trabajo frente al fuego.
Cada vela se crea pasando la cera por el fuego y moldeando las escamas con unas pinzas. Posteriormente, se decoran con diamantina y se les añade una carita de ángel, símbolo de los seres queridos fallecidos.
La producción de las más de 2 mil velas que comercializan las hermanas Flores inicia un mes antes de la celebración. Junto con ellas, otras 10 familias en Tochimilco mantienen viva esta llama ancestral.
El arte de las Velas Escamadas no sólo se aprecia en México, sino que también se ha extendido a otros países donde los migrantes mexicanos mantienen viva esta tradición.
El legado de una tradición
La técnica para elaborar las Velas Escamadas fue heredada a doña Arcelia por su suegra, quien le transmitió los secretos del oficio y el amor por este arte.
Rubicela, hermana de Arcelia, también participa en la elaboración de estas velas, asegurando la continuidad de la tradición familiar.
Las Velas Escamadas son un testimonio de la creatividad y la devoción de los artesanos poblanos, quienes con sus manos transforman la cera en un símbolo de luz y recuerdo.