Los guardias civiles sobrevivientes al ataque de narcolanchas en Barbate denuncian falta de medios

Los cuatro guardias civiles que sobrevivieron al ataque de la narcolancha en el puerto de Barbate (Cádiz) en el que fueron asesinados los agentes Miguel Ángel González y David Pérez han comparecido ante la jueza María Eulalia Chanfreut. Sus declaraciones, que han tenido lugar el pasado 10 de mayo, no han aportado casi datos sobre la presunta autoría del doble crimen, pero sí han puesto de manifiesto la inferioridad de medios con la que los miembros del instituto armado hicieron frente a los delincuentes.

Falta de preparación y medios inadecuados

Los agentes han declarado que "la barca en la que íbamos no estaba preparada para ese cometido de ninguna de las maneras", y que "la única protección" que tenían eran sus armas cortas. "Ni siquiera pudimos ir con arma larga", ha señalado uno de los guardias civiles.

Además, los agentes han denunciado que "nunca estuvo claro" cuál era su cometido y que recibieron órdenes confusas por parte de sus superiores. "Se nos dice que nos pongamos un neopreno y una vez en el coche nos hacen entrega de dos cascos para protección de la cabeza, y nos indican que hagamos lo que podamos", ha relatado uno de los guardias civiles.

Denuncias contra mandos del instituto armado

Las dos asociaciones profesionales mayoritarias entre los agentes, la Asociación Unificada de la Guardia Civil (AUGC) y Justicia para la Guardia Civil (Jucil), se han personado en la causa como acusación y han presentado sendas denuncias contra mandos del instituto armado por haber mandado a los seis agentes a enfrentarse a las narcolanchas con medios claramente insuficientes.

El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Barbate ha abierto unas diligencias de investigación por estos hechos.

Declaraciones de la jueza

La jueza María Eulalia Chanfreut ha pedido a la Fiscalía y a los abogados de las defensas y las acusaciones que las cuestiones que plantearan a los agentes "fueran lo más breve posible para que este acto no tenga una duración excesiva, que pueda causar un mayor daño, un mayor perjuicio" a las víctimas.

La jueza ha comenzado los interrogatorios con cuestiones siempre dirigidas a que aportaran nuevos datos que permitan identificar a los autores de los hechos, aún en paradero desconocido, tras el informe de la Guardia Civil que exonera del crimen a los seis primeros detenidos.