Los perros de apoyo emocional: una ayuda invisible que lucha por el reconocimiento

En el mundo canino, los perros de apoyo emocional están ganando cada vez más terreno como compañeros terapéuticos para personas con problemas de salud mental. Estos perros están entrenados para proporcionar apoyo y consuelo a personas con estrés, ansiedad, depresión y fobias, entre otros trastornos.

María y su perra Inca, un vínculo inseparable

María, una mujer que prefiere mantener el anonimato, experimentó de primera mano los beneficios de un perro de apoyo emocional cuando adoptó a Inca, una mestiza de tamaño mediano. Inca está entrenada para ayudar a María a sobrellevar la depresión que experimentó tras mudarse a Madrid. El vínculo entre ambas es inquebrantable: Inca detecta los ataques de llanto de María y se acurruca a su lado, la incita a salir a pasear y la ayuda a rebajar la ansiedad con solo su presencia.

Beneficios de los perros de apoyo emocional, avalados por expertos

Carmen Castro, psicóloga de la Asociación Hydra, destaca los beneficios de los perros de apoyo emocional. Estos animales no solo proporcionan apoyo emocional, sino que también mejoran el ambiente en los hogares, reduciendo las discusiones y fomentando las visitas de los hijos. Además, dan seguridad a las víctimas de violencia machista y a los niños que deben declarar en los juzgados.

Trabas al reconocimiento oficial, una lucha constante

A pesar de los beneficios demostrados, los perros de apoyo emocional encuentran trabas en su reconocimiento oficial. La última Ley de Bienestar Animal no ha cambiado su situación, y su aceptación depende en gran medida del establecimiento al que se acuda. Carmen Castro denuncia la falta de conocimiento y apoyo por parte de algunos profesionales de la salud y la sociedad en general, que a menudo ven a estos perros como meros animales de compañía.

El futuro de los perros de apoyo emocional, un camino hacia el reconocimiento

Sin embargo, poco a poco, los perros de apoyo emocional van ganando terreno en nuevos espacios, como los juzgados y los hospitales. Castro confía en que, con el tiempo y la difusión de su labor, estos perros obtendrán el reconocimiento y la aceptación que merecen.

Conclusión: un aliado invisible en la lucha contra las dificultades emocionales

Los perros de apoyo emocional son una ayuda invisible pero poderosa para las personas que luchan contra problemas de salud mental. A pesar de las trabas que aún encuentran, estos animales están demostrando su valía y poco a poco van ganando terreno en la sociedad. Su presencia es un faro de esperanza y apoyo en el camino hacia el bienestar emocional.