Marruecos es insuficiente para contener la presión migratoria en Ceuta
La ciudad autónoma de Ceuta vive una situación de tensión ante el incremento de los intentos de entrada de inmigrantes irregulares en los últimos días. En la madrugada del lunes, unos 200 inmigrantes intentaron cruzar a nado el espigón fronterizo de Benzú, lo que activó un dispositivo de emergencia por parte de la Guardia Civil, Salvamento Marítimo y la Cruz Roja.
Según fuentes de la Administración, los esfuerzos de Marruecos para contener los cientos de intentos diarios son notables, pero resultan insuficientes. La colaboración de las autoridades marroquíes en el proceso de devolución podría agilizarse, señalan las mismas fuentes.
Desde el viernes, se han registrado casi 600 intentos de entrada, tanto a nado como a través de la valla fronteriza. Las autoridades desconocen cuántos de ellos han logrado cruzar, pero se trata de una cifra muy superior a las 543 entradas registradas hasta el 31 de julio, según datos oficiales del Ministerio del Interior.
Los menores migrantes colapsan los centros de acogida
La situación es especialmente preocupante en los centros de acogida de menores, que se encuentran desbordados. Actualmente, hay casi 400 menores acogidos en Ceuta, cuando la capacidad es de tan solo 130, lo que supone un 300% de ocupación.
Esta sobreocupación ha obligado al Gobierno de la ciudad a habilitar una nave industrial como alojamiento temporal, similar a las que se utilizaron en la entrada masiva de 10.000 inmigrantes en mayo de 2021.
El CETI también está desbordado
El Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI) de Ceuta también se encuentra desbordado, con un centenar de personas por encima de su capacidad. Esta instalación estatal acoge provisionalmente a los migrantes y refugiados que llegan a Ceuta hasta que son trasladados a la Península.
El presidente de Ceuta pide un reparto equitativo de los menores migrantes
Ante esta situación, el presidente de Ceuta, Juan Jesús Vivas, ha reclamado un cambio en la ley de extranjería para obligar a todas las comunidades autónomas a acoger a los menores migrantes que llegan a Ceuta, Melilla y Canarias.
La propuesta de Vivas fue rechazada en el Congreso por el PP, Junts y Vox, lo que ha generado un profundo malestar en la ciudad autónoma.