Más Madrid acusa a Errejón y Arenillas de minimizar la agresión denunciada en 2023 y busca cerrar la crisis sin más dimisiones
Mónica García, ministra de Sanidad y coportavoz de Más Madrid, ha acusado este lunes al fundador del partido, Íñigo Errejón, y a la exdiputada Loreto Arenillas, de “minimizar la agresión” que habría cometido el exportavoz de Sumar durante un festival en Castellón en 2023, y que fue denunciado por la víctima a través de unos mensajes anónimos en la red social X (antiguo Twitter).
Reacción de Más Madrid
En una rueda de prensa ofrecida junto a la portavoz municipal, Rita Maestre, y la autonómica, Manuela Bergerot, la líder de la formación ha reconocido que su organización supo del episodio al poco de haber ocurrido, ha admitido que no haberlo investigado en profundidad fue “un error”, y ha descartado que haya más dimisiones por ello. De esta manera, Más Madrid intentará dar carpetazo a una crisis que ha hecho temblar sus cimientos con la salida de la política de Errejón y la dimisión como diputada de Arenillas (que aún no se ha formalizado) señalada por intentar mediar con la denunciante para evitar que el escándalo fuera a más.
“Nunca encubrí ese episodio ni ningún otro (...) Defiendo que actué con corrección”, ha dicho la aludida en un comunicado publicado tras la rueda de prensa. “Lejos de tapar u ocultar nada, lejos de minimizar los hechos, me puse a disposición del director de comunicación, Luis Giménez, para explicarlo públicamente si era necesario”.
Declaraciones de Mónica García
“En junio de 2023 nos enteramos por las redes de unos hechos relacionados con Errejón”, ha dicho la ministra García. “A partir de ahí, nosotros no tuvimos acceso a más información y el hilo [de mensajes] fue borrado”, ha seguido. “No pudimos o no supimos hacer nada más”, ha añadido. “Fue un error”, ha seguido. Y sobre la mediación protagonizada por la exjefa de gabinete de Errejón, ha acusado: “Actuó por su cuenta. No tenemos la certeza de que Arenillas actuara correctamente”.
Reconocimiento del error
Así, las líderes de Más Madrid han reconocido que conocieron el caso al poco de ser denunciado en las redes sociales. También, que la respuesta de la organización fue “insuficiente” y “un error”. De hecho, incluso han subrayado que de haber sabido todo lo que saben ahora, habrían ido “directamente a comisaría”. Sin embargo, de todo ese acto de contrición pública no se derivarán más destituciones o dimisiones, pese a que Arenillas, en su comunicado de despedida, señaló directamente a Bergerot como conocedora del caso desde el primer momento, en tanto que secretaria de organización en aquella época.
Descartan más dimisiones
“No”, ha dicho, rotunda, García, en respuesta a las preguntas de los periodistas convocados en el Espacio Downtown de la capital de España. “Las explicaciones que hemos dado son suficientes para que el caso de un perpetrador misógino no se convierta en un caso contra tres dirigentes políticas”, ha argumentado Maestre, que el domingo por la noche publicó una carta personal sobre un caso que afecta a su expareja (“Un buen novio era a la vez un misógino que volvía a casa con normalidad después de agredir a una mujer de 20 años”, escribió).
Medidas tomadas
Hasta este lunes, el partido ha tomado dos decisiones tangibles para atajar la crisis: forzar la salida de Errejón y destituir de todos sus cargos a Arenillas, acusada de haber mediado con la denunciante anónima del primer caso conocido para evitar el “escarnio público” de Errejón.
“Devastadas”, ha recalcado la ministra sobre las tres coportavoces. “Llevamos días en shock”, ha añadido sobre el conjunto de Más Madrid.
El desconcierto de Más Madrid
El estallido del caso, en descripción hecha por Gómez, ha dejado a la formación sumida en un “profundo dolor y desconcierto”. “Pensábamos que [Errejón] tenía problemas personales de otra índole”, han dicho las tres líderes del partido, sin concretar a qué se referían. “Intentamos ayudarle en varias ocasiones”, han seguido. “Nadie, nadie, conocía las terribles acusaciones que estamos conociendo ahora, en los últimos días”, se han justificado. “No le habríamos recomendado ayuda profesional, habríamos ido directamente a una comisaría”
La salida de Arenillas
La vuelta a la normalidad, por lo tanto, no será inmediata. Ni está garantizada. Para empezar, por la forma en la que se produjo el viernes la salida de Arenillas. A las 21.26, tras una jornada maratoniana, Más Madrid publicó un comunicado en el que anunciaba que su representante se negaba a dimitir como diputada. Menos de un cuarto de hora después, a las 21.40, la aludida, que ya había sido destituida de todos sus cargos orgánicos, publicó un escrito en el que comunicaba que dejaba el acta, decisión personal e intransferible. Pero lo hizo sin asumir los hechos por los que se le señala. Todo lo contrario.
Primero, porque la ya exdiputada se marchó negando los hechos que se le imputan, acusando a la dirección de usarla como “chivo expiatorio”, y afirmando que Bergerot conocía desde 2023 el caso, en tanto que secretaria de organización. Segundo, porque tras leer que su formación la acusaba de haber mediado por su cuenta en el caso denunciado en redes, se revolvió y denunció que Más Madrid fue quien decidió dar carpetazo al asunto, y que no ha respetado su presunción de inocencia. Y tercero, porque tras la rueda de prensa de este lunes, Arenillas ha publicado un durísimo comunicado en sus redes sociales.
Comunicado de Arenillas
“Me veo en la obligación de defenderme y desmentir sus afirmaciones”, ha escrito sobre las tres coportavoces. “Nunca encubrí ese episodio [en referencia al de 2023] ni ningún otro”, ha añadido. “Lo que hice fue informar a la víctima de opciones de reparación con una agente de género (...), también reprendí a Errejón y le insté a buscar ayuda y a abandonar comportamientos que dañan a las mujeres, puse en conocimiento de la secretaria de organización, en aquel momento Manuela Bergerot, así como de la secretaria de feminismos, Cristina Castillos, lo que ocurría”, ha seguido. “Y lejos de tapar u ocultar nada, lejos de minimizar los hechos, me puse a disposición del director de comunicación, Luis Giménez, para explicarlo públicamente si era necesario”, ha recordado.
Arenillas, además, ha puesto la diana sobre la dirección de Más Madrid, pues, ha escrito, fue esta quien “no consideró relevantes los hechos para elevarlos a órganos superiores, ni hacerlos públicos, ni activar los procedimientos establecidos en nuestros estatutos y normas internas”.
“Aquella decisión fue un error”, ha reconocido la militante de Más Madrid, que se sigue refiriendo a la organización como “mi partido”. “Mis disculpas más sinceras a aquella mujer”, ha seguido. “Pero un abuso no se tapa con otro”.
De esta manera, y siempre según su versión, Más Madrid habría preferido guardar silencio, dando prioridad a la continuidad del presunto agresor frente a la posibilidad de escuchar a la denunciante.