El regreso de la figura ultradelgada: ¿Un retroceso en la diversidad corporal?

La industria de la moda, que durante un tiempo abrazó la diversidad corporal, parece estar dando marcha atrás. Según un artículo de The New York Times Company (2024), la presencia de modelos de talla grande y mediana en las pasarelas está disminuyendo drásticamente, reviviendo la tendencia de la figura ultradelgada.

Los datos hablan claro

El informe de inclusión de tallas de otoño de 2024 de Vogue Business revela una realidad preocupante: de 8,703 diseños presentados en 198 desfiles, solo el 2% correspondía a tallas medianas (definidas como la talla estadounidense 6-12) y un escaso 0.3% a tallas grandes. Estos datos son aún más alarmantes si se comparan con la temporada de primavera, donde la representación de tallas grandes alcanzaba el 0.8% y las medianas el 4%.

Además, Tagwalk, un motor de búsqueda de moda, informa que en la última temporada de desfiles, un 16% menos de colecciones incluyeron al menos una modelo con curvas en comparación con la temporada anterior. De los 20 desfiles más vistos, solo cuatro contaron con tres modelos de este tipo: Hermès, Givenchy, Coach y Marni.

¿Por qué este cambio?

David Bonnouvrier, fundador de DNA Model Management, sugiere que este retroceso es parte de un alejamiento general del progresismo social. «La presión de pares para diversificar la pasarela a raíz de los movimientos #MeToo y Black Lives Matter provocó un cambio notable en las concepciones de la belleza», explicó Bonnouvrier (The New York Times Company, 2024). Sin embargo, con la diversidad, la equidad y la inclusión ahora bajo escrutinio, su expresión en la moda, incluida la diversidad de tallas, está bajo presión.

Hillary Taymour, fundadora y diseñadora de Collina Strada, atribuye este fenómeno al auge de medicamentos como Ozempic para la pérdida de peso. «Todas las chicas de talla grande pasaron a talla mediana gracias a Ozempic, y todas las chicas de talla mediana pasaron a talla estándar», afirmó Taymour (The New York Times Company, 2024).

Las implicaciones para la salud pública

El regreso de la figura ultradelgada en las pasarelas tiene implicaciones preocupantes para la salud pública, especialmente entre los jóvenes. Dada la conexión documentada entre las redes sociales y los trastornos alimentarios, las imágenes de modelos extremadamente delgadas pueden ejercer una presión significativa sobre las personas, llevándolas a adoptar comportamientos poco saludables para alcanzar un ideal de belleza inalcanzable. La moda, al convertirse en un espectáculo masivo, tiene una responsabilidad en la promoción de una imagen corporal saludable y realista.

¿Qué están haciendo las marcas?

Algunas marcas, como Collina Strada, siguen comprometidas con la inclusión de modelos de talla grande y mediana en sus desfiles. Hillary Taymour considera que es crucial «relacionarse con todos los tipos de tu base de clientes» (The New York Times Company, 2024). Sarah Burton, la nueva directora creativa de Givenchy, también ha expresado su deseo de «celebrar la multiplicidad, la belleza y la fuerza de la feminidad, libre de definiciones estrechas sobre cómo debemos ser o vernos a nosotras mismas» (The New York Times Company, 2024).

Sin embargo, otras marcas, como Nina Ricci, han reducido la presencia de modelos de talla grande en sus desfiles. Una vocera de Nina Ricci justificó este cambio argumentando que la competencia por el número limitado de modelos curvilíneas dificulta su contratación con suficiente antelación para adaptar las muestras de pasarela a sus cuerpos (The New York Times Company, 2024). No obstante, aseguran que la diversidad de tallas «sigue siendo un tema importante para nosotros» (The New York Times Company, 2024).

Un futuro incierto

El futuro de la diversidad corporal en la moda es incierto. David Bonnouvrier no espera que la tendencia cambie pronto, y cree que «la puerta se está cerrando, sin prisa, pero sin pausa» (The New York Times Company, 2024). La industria de la moda, los medios de comunicación y la sociedad en su conjunto deben reflexionar sobre el impacto de estos cambios y trabajar juntos para promover una imagen corporal saludable y realista, donde la diversidad sea celebrada y no marginada.

El papel de los diseñadores

Los diseñadores tienen una gran responsabilidad en la creación de una imagen más inclusiva y diversa en la moda. Al elegir modelos de diferentes tallas, etnias y edades, pueden contribuir a cambiar los estándares de belleza y promover una visión más realista de la feminidad. Además, pueden diseñar ropa que se adapte a diferentes tipos de cuerpo, en lugar de obligar a las mujeres a encajar en un molde predefinido.

La influencia de las redes sociales

Las redes sociales también juegan un papel importante en la percepción de la imagen corporal. Es fundamental promover contenido que celebre la diversidad y desafíe los estereotipos de belleza. Los influencers y las celebridades tienen la responsabilidad de utilizar sus plataformas para fomentar una imagen corporal positiva y realista, alentando a sus seguidores a amarse a sí mismos tal como son.

Conclusión

El regreso de la figura ultradelgada en la moda es un retroceso preocupante que puede tener consecuencias negativas para la salud pública. Es crucial que la industria de la moda, los medios de comunicación y la sociedad en su conjunto trabajen juntos para promover una imagen corporal saludable y realista, donde la diversidad sea celebrada y no marginada. La belleza reside en la diversidad, y es hora de que la moda refleje esta realidad.

Referencias

The New York Times Company. (2024). Otra vez está de moda ser ultradelgada. Grupo Milenio. Recuperado de [URL del artículo]