Monte Albán se adapta para recibir a personas con discapacidad

En el marco de la celebración del Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) continúa adaptando sus sitios históricos para que sean más accesibles para quienes tienen alguna discapacidad.

La zona arqueológica de Monte Albán, una de las primeras ciudades de Mesoamérica, ya cuenta con adecuaciones para atender a personas con discapacidad motriz, visual y/o auditiva.

Recorridos inclusivos

Para garantizar una experiencia óptima, se ofrecen recorridos con guías capacitados y sensibilizados, quienes explican el legado arquitectónico de la zona a quienes nunca han tenido la oportunidad de asistir.

Betsabeth Méndez, una joven de 37 años con discapacidad auditiva, pudo conocer Monte Albán gracias al guía educativo Jesús Juárez, quien le explicó los conjuntos arqueológicos en lenguaje de señas mexicanas.

Para las personas con ceguera, los guías piden que palpen con sus bastones los cimientos de los antiguos templos, lo que les ayuda a hacerse una idea del lugar.

Falta trabajo por hacer

David Andrade, subdirector de la zona de Monte Albán, reconoce que aún falta mejorar la accesibilidad del sitio.

Las autoridades del INAH buscan adaptar otras zonas arqueológicas para que las personas con discapacidad sepan que también hay espacios y guías calificados que les mostrarán los restos de las antiguas civilizaciones.