Moreno: el partido más pobre del Conurbano bonaerense

Moreno es el partido más pobre y postergado del Gran Buenos Aires, donde abuelos, adultos y niños viven en las peores condiciones. Según el último Censo Nacional, es el municipio bonaerense con mayor crecimiento demográfico desde 2010, con un aumento de casi el 30% en 12 años. Actualmente, cuenta con aproximadamente 350.000 habitantes.

Infraestructura deficiente

La infraestructura de Moreno es deficiente. Ocho de cada diez familias viven sin cloacas, lo que significa que sus desechos se acumulan en pozos ciegos debajo de sus casas. En muchas zonas inundables, estos desechos son arrastrados por las aguas subterráneas. Cada seis u ocho meses, un camión atmosférico debe extraer los desechos acumulados.

Además, seis de cada diez familias no tienen acceso a gas de red, por lo que deben utilizar garrafas para cocinar y ducharse. Esta situación no ha mejorado significativamente en los últimos años.

Entre el 60% y el 70% de las calles de Moreno son de tierra, lo que dificulta el acceso de ambulancias y patrulleros a los barrios en caso de emergencias.

Crecimiento demográfico descontrolado

El crecimiento demográfico de Moreno se ha debido en gran medida a la usurpación de tierras, que ha generado barrios superpoblados y sin servicios básicos.

Gestión municipal

Mariel Fernández, ex piquetera del Movimiento Evita, es intendenta de Moreno desde hace cinco años. Durante su gestión, se han extendido los parques industriales y ha mejorado la cobrabilidad de las tasas comunales. Sin embargo, los problemas de infraestructura y pobreza persisten.

"Vení a recorrer Moreno y los bolsones de extrema pobreza y gente hacinada. Te aseguró que acá vive un 50% más que esa cifra que publicó el Indec en 2022", afirma un puntero del PJ.

La situación de Moreno es un reflejo de la pobreza y la desigualdad que afectan a gran parte del Conurbano bonaerense. Es urgente que las autoridades tomen medidas para mejorar las condiciones de vida de los habitantes de este partido.

Fuente: Clarín