Oda a la vida tranquila en Olmeda de las Fuentes: tan cerca de Madrid y tan lejos

Este pueblecito de casas blancas de la Alcarria de Alcalá, a 60 kilómetros de la capital, es un refugio de artistas desde hace 70 años. La encina ‘La Pica’, que quizá tenga mil años, es la vecina más vieja de un lugar en el que no hay ruido ni museos y que, sin duda, merece una excursión.

Un remanso de paz a un paso de la ciudad

Para los que buscan huir del ajetreo y el bullicio de Madrid, Olmeda de las Fuentes es el destino perfecto. Este tranquilo pueblo ofrece un ritmo de vida pausado, en el que el sonido del silencio solo se rompe por el rumor de las fuentes y el lejano sonido de un laúd o una guitarra.

Alejado del turismo de masas, Olmeda de las Fuentes conserva su encanto auténtico. No hay grandes hoteles ni restaurantes con estrella Michelin, solo casas rurales y tabernas donde se puede comer y beber modestamente.

El refugio de los artistas

Olmeda de las Fuentes lleva décadas atrayendo a artistas de todo tipo. Pintores, escultores, músicos y escritores han encontrado en este pueblo la inspiración y la tranquilidad que necesitan para crear.

Uno de los primeros artistas en establecerse en Olmeda fue el pintor Álvaro Delgado, a mediados del siglo XX. Desde entonces, muchos otros artistas han seguido sus pasos, como Luis García Ochoa, Francisco San José, José Vela Zanetti y Eugenio Fernández Granel.

Hoy en día, Olmeda de las Fuentes es un hervidero de creatividad. En sus calles se pueden encontrar galerías de arte, talleres de artesanía y estudios de música. Incluso hay una ruta guiada que recorre los lugares donde vivieron y trabajaron los artistas más destacados del pueblo.

La encina milenaria

Uno de los símbolos de Olmeda de las Fuentes es la encina ‘La Pica’. Se dice que este árbol tiene más de mil años y es la vecina más vieja del pueblo. Su imponente presencia y su sombra acogedora invitan a sentarse y disfrutar de la tranquilidad del lugar.

La encina ‘La Pica’ es un lugar de encuentro para los vecinos de Olmeda de las Fuentes. Aquí se celebran comidas campestres, se organizan conciertos y se comparten historias y leyendas.

Un pueblo con historia

Además de su belleza natural y su ambiente artístico, Olmeda de las Fuentes también tiene una rica historia. El pueblo fue fundado en el siglo XIII y conserva numerosos vestigios de su pasado, como la iglesia románica de San Pedro y el puente medieval sobre el río Henares.

Hoy en día, Olmeda de las Fuentes es un pueblo tranquilo y acogedor, orgulloso de su historia y su patrimonio artístico. Es un lugar perfecto para escapar del estrés de la vida moderna y disfrutar de la belleza y la tranquilidad de la naturaleza.