Las orquídeas: Plantas delicadas que necesitan cuidados especiales
Las orquídeas son unas de las plantas más bellas y populares del mundo, pero también son unas de las más delicadas. A menudo mueren poco después de ser compradas, lo que puede ser frustrante para los jardineros que no están seguros de qué hicieron mal.
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Hay varias razones por las que las orquídeas mueren, pero una de las más comunes es el riego excesivo. A las orquídeas les gusta la tierra ligeramente húmeda, pero no empapada. Si las riegas con demasiada frecuencia, las raíces pueden pudrirse y la planta morirá.
Otra razón común por la que las orquídeas mueren es la falta de luz. Las orquídeas necesitan luz brillante e indirecta para crecer bien. Si no reciben suficiente luz, dejarán de florecer y eventualmente morirán.
Una temperatura inadecuada también puede hacer que las orquídeas mueran. Las orquídeas prefieren temperaturas entre 18 y 29 grados centígrados. Si la temperatura es demasiado alta o demasiado baja, la planta puede sufrir estrés y morir.
Si tienes problemas para mantener vivas tus orquídeas, hay algunas cosas que puedes hacer. Primero, asegúrate de regarlas solo cuando la tierra esté seca al tacto. En segundo lugar, colócalas en un lugar donde reciban mucha luz brillante e indirecta. En tercer lugar, mantén la temperatura entre 18 y 29 grados centígrados.
Siguiendo estos consejos, podrás ayudar a tus orquídeas a prosperar y disfrutar de sus hermosas flores durante muchos años.