¿Cuáles son los pecados que no tienen perdón de Dios, según la Biblia?
El catolicismo divide los pecados en veniales y capitales (mortales). Los apóstoles dijeron que hay un pecado que nunca será perdonado.
Pecados veniales y mortales
La Iglesia explica que un pecado es una ofensa a Dios. Sin embargo, tal como consta en los Evangelios, Jesucristo perdonó en varias oportunidades a los pecadores y le transmitió su poder a los apóstoles y a sus sucesores para que hicieran lo mismo. Poder que está hoy en el Papa y en todos los sacerdotes del catolicismo.
Los pecados se dividen desde el punto de vista moral en veniales y mortales o capitales. Estos últimos significan la pérdida de la santidad y la privación del estado de gracia.
La reconciliación o confesión permite el arrepentimiento y lograr el perdón de Dios a quienes han cometido un pecado. Porque sin arrepentimiento y perdón de Dios el creyente sufrirá la muerte eterna en el Infierno según aseguran los dogmas católicos.
El pecado que no tiene perdón
Existe un pecado que según los Santos Evangelios no tienen perdón de Dios: la blasfemia contra el Espíritu Santo.
El Evangelio según Marcos expresa que “se perdonará todo a los hijos de los hombres los pecados y las blasfemias por muchas que éstas sean. Pero el que blasfeme contra el Espíritu Santo no tendrá perdón nunca antes bien será reo de pecado eterno”.
Santo Tomás de Aquino escribió que la blasfemia “es un pecado irremisible según su naturaleza en cuanto excluye aquellos elementos gracias a los cuales se da la remisión de los pecados”.
Entonces la blasfemia no consiste en el hecho de ofender con palabras al Espíritu Santo. “Por el contrario en el rechazo de aceptar la salvación que Dios ofrece al hombre por medio del Espíritu Santo que actúa en virtud del sacrificio de la Cruz” explica ACI Prensa.
El papa Francisco ha dicho: “Nosotros sabemos que el Señor perdona todo si nosotros abrimos un poco el corazón. ¡Todo! Los pecados y también todas las blasfemias que dirán pero quien blasfema contra el Espíritu Santo no será perdonado en eterno”.