¡Piratas en el «Caribe gallego»!
En medio de la Ría de Arousa, el islote Areoso, conocido como el «Caribe gallego» por sus hermosas playas blancas y aguas turquesas, sufre el impacto del turismo masivo. Las autoridades han implementado un cupo diario de visitantes y multas, pero la falta de vigilancia y las empresas «piratas» dificultan el control.
Turismo descontrolado
La masificación turística ha llevado a limitar el acceso a Areoso a 150 personas en temporada alta y 60 en temporada baja, con turnos específicos. Sin embargo, los usuarios y empresas de turismo de aventuras denuncian que el sistema de reservas online es deficiente y permite que una sola persona o grupo acapare autorizaciones para varios días, dejando a otros sin posibilidad de visitar el islote.
Vigilancia insuficiente
Marta Iglesias, fundadora de Piragüilla Ocio y Aventura, lamenta la falta de vigilancia permanente. «Los que no tienen permiso saben que no pasa nada, que solo tendrían que abandonar la isla si los pillan», afirma. «Mientras tanto, pueden hacerse fotos y publicarlas en redes sociales». Además, Iglesias denuncia la proliferación de empresas «piratas» que ofrecen rutas ilegales y llevan a turistas a Areoso sin autorización.
Prioridad al kayak
Las empresas de turismo de aventuras piden que se prioricen las plazas para ir en kayak en lugar de en barco, ya que es una actividad más respetuosa con el medio ambiente y permite un mayor control. Sin embargo, los últimos cambios en la aplicación de reservas han dado ventaja a los turistas en barco.
Falta de sanciones
A pesar de que las normas establecen multas para quienes incumplan el cupo de visitantes, estas no se están aplicando, lo que fomenta el turismo ilegal. Los empresarios piden que se impongan sanciones ejemplares para disuadir a los visitantes sin permiso y a las empresas «piratas».
Medidas urgentes
Para proteger el frágil ecosistema de Areoso y garantizar un turismo sostenible, es esencial que las autoridades tomen medidas urgentes:
- Mejorar el sistema de reservas online para evitar que una sola persona o grupo acapare plazas.
- Incrementar la vigilancia y aplicar multas a quienes incumplan el cupo de visitantes y a las empresas «piratas».
- Priorizar las plazas para ir en kayak en lugar de en barco.
- Sensibilizar a los turistas sobre la importancia de respetar las normas y proteger el medio ambiente.
Solo con estas medidas se podrá garantizar la sostenibilidad del «Caribe gallego» y preservar su belleza para las generaciones futuras.