La Guardia Nacional, bajo el control de la Sedena
El Senado mexicano ha aprobado este viernes la reforma constitucional para traspasar el control de la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), una medida que ha generado críticas por parte de la oposición.
Una medida controvertida
La reforma fue aprobada por 25 votos a favor y 10 en contra en las comisiones unidas de Puntos Constitucionales y Estudios Legislativos del Senado. La oposición, representada por Movimiento Ciudadano y Acción Nacional, considera que la medida supone una militarización de la seguridad pública.
"Hemos presenciado aquí un verdadero espectáculo de maromas mentales, para decir que no están militarizando la seguridad pública", expresó el senador panista Ricardo Anaya.
El argumento del Gobierno
Por su parte, el Gobierno defiende que la reforma es necesaria para hacer frente a los problemas de inseguridad que aquejan al país.
"Con esta reforma se dotará al Estado de una fuerza de seguridad pública nacional disciplinada y profesional, capaz de enfrentar los desafíos del crimen organizado y otras amenazas a la seguridad", aseguró la presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales del Senado, Ernestina Godoy.
El futuro de la Guardia Nacional
La reforma aprobada en el Senado aún debe ser ratificada por el pleno de la Cámara Alta. Si se aprueba, la Guardia Nacional quedará bajo el control de la Sedena, lo que supone un cambio significativo en la estructura de las fuerzas de seguridad mexicanas.
La Guardia Nacional fue creada en 2019 como un cuerpo policial de carácter civil, pero desde su creación ha estado dirigida por militares. La reforma aprobada este viernes consolida el control militar sobre la Guardia Nacional.
Críticas de la oposición
La oposición ha criticado duramente la reforma, argumentando que supone un retroceso en la construcción de una policía civil y profesional en México.
"Esta reforma es un paso atrás en la construcción de un Estado democrático de derecho", afirmó la senadora de Movimiento Ciudadano, Alejandra Barrales.
"La militarización de la seguridad pública no ha dado resultados en México, al contrario, ha generado más violencia y violaciones a los derechos humanos", añadió Barrales.
El debate continúa
La reforma aún debe ser aprobada por el pleno del Senado, por lo que el debate sobre el futuro de la Guardia Nacional continuará en las próximas semanas.
La decisión final sobre el traspaso del control de la Guardia Nacional a la Sedena tendrá importantes implicaciones para la seguridad pública en México.