En un enfrentamiento verbal, el abogado Roberto Gil Zuarth acusa al presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, de difundir información falsa sobre sus supuestos antecedentes penales en España y lo califica de "cobarde".

Antecedentes
Noroña había declarado que Gil Zuarth fue descalificado como aspirante a ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) debido a una condena en España. Gil Zuarth niega rotundamente esta afirmación, alegando que se trata de una "infamia" y que nunca ha sido condenado a pena privativa de libertad.

Respuesta de Gil Zuarth
Gil Zuarth acusa a Noroña y a los miembros del Comité de Evaluación de la SCJN de actuar con "cobardía" al utilizar información falsa para excluirlo del proceso de selección. Afirma que impugnará el resultado y denunciará las irregularidades que, según él, se han cometido.
"Son unos cobardes que no quieren enfrentarse en las urnas con alguien que piensa diferente y que además ha estado evidenciando el tamaño del fraude que están cometiendo", declaró Gil Zuarth.

Declaraciones de Noroña
Por su parte, Noroña sostiene que Gil Zuarth fue descalificado por una condena en firme en España relacionada con una agresión física. Afirma que el abogado se involucró en una pelea fuera de un lugar de entretenimiento y dañó a otra persona.
"¿Cómo alguien que quiere ser ministro de la Corte se líe a golpes afuera de un lugar de entretenimiento y que dañe físicamente a una persona?", cuestionó Noroña.
Impugnación y Denuncia
Gil Zuarth ha anunciado que impugnará el resultado de la descalificación ante la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial. También ha manifestado su intención de crear una agrupación política para denunciar las supuestas irregularidades en el proceso de selección.
Contexto
La descalificación de Gil Zuarth ha generado polémica y especulaciones sobre posibles motivaciones políticas. El abogado es un exsenador del Partido Acción Nacional (PAN) y un crítico frecuente del gobierno actual.
El proceso de selección de ministros de la SCJN ha sido objeto de escrutinio en los últimos meses, con acusaciones de falta de transparencia y discrecionalidad.