Salvador Illa está en condiciones de someterse al debate de investidura

Josep Rull, presidente del Parlament, abrirá este martes por la mañana la ronda de consultas con los líderes de los grupos parlamentarios para comunicarles que Salvador Illa, candidato socialista, está en condiciones de someterse al debate de investidura.

Respaldo definitivo

Illa recibió este lunes el espaldarazo definitivo para ser president después de que el Jovent Republicà —las juventudes de ERC— dieran vía libre para que su diputada Mar Besses vote a favor del líder del PSC. La previsión es que la Diputación permanente se reúna este miércoles y convoque la sesión para el jueves.

Agenda incierta

Sin embargo, la agenda está cogida con pinzas porque es muy probable que el debate se acabe aplazando si se produce la detención de Carles Puigdemont, quien ha reiterado su compromiso de asistir a la sesión. El plazo para investir a un president expira el 26 de este agosto, por lo que Illa aún dispone de dos semanas de margen.

Apoyos garantizados

Miembros del PSC y de los comunes ven muy probable que Rull suspenda el pleno si el expresident es arrestado, pero no tienen la menor duda de que la investidura se saldará esta primera quincena de agosto y que Illa podrá formar govern.

Proceso de investidura

La previsión es que Rull se reúna a partir de las 9.30 de la mañana con el socialista y que por el despacho de audiencias desfilen por este orden los líderes parlamentarios de Esquerra (Josep Maria Jové y Marta Vilalta); Comuns (Jéssica Albiach); Junts (Albert Batet y Mònica Sales); PP (Alejandro Fernández); Vox (Ignacio Garriga); CUP (Dani Cornellà) y Aliança Catalana (Sílvia Orriols y Ramón Abad). A las 13.45, Rull hará una declaración formal sobre los apoyos que ha recibido el candidato.

Acuerdo entre ERC y PSC

Tras un acto de investidura fallida y 40 días de negociaciones con suspense final, el socialista reunió la noche de este lunes los 68 votos —42 de su partido, el PSC; 20 de ERC y seis de los comunes— que necesita para ser investido después de que las juventudes republicanas le dieran el sí definitivo.

Contenido del acuerdo

El colectivo había anunciado en junio que no darían apoyo a la investidura si los socialistas no garantizaban el referéndum de autodeterminación. Esa medida no está en el pacto alcanzado la semana pasada entre los dos partidos, que han descartado la mesa de diálogo entre gobiernos para solucionar el conflicto y que han acordado crear una “convención” para abordarlo en el que buscan implicar a todos los partidos.

Convención para abordar el conflicto

Ese nuevo ente recoge la teoría que siempre ha defendido el PSC de que la situación de Cataluña es un problema entre catalanes y aspira a que finalmente se vote un acuerdo y no una pregunta binaria divisiva. Descartado la consulta por los socialistas desde el primer día, ERC ha priorizado el modelo de financiación propio pactado para que Cataluña recaude y liquide todos los impuestos contemplando la solidaridad.

Mensaje de Illa

Illa lanzó este sábado un mensaje tanto a ERC como a los comunes en el que aseguraba que su intención es cumplir el contenido de los dos acuerdos que ha sellado con ambas formaciones y que le garantizan la presidencia. El socialista se vio obligado a dar ese paso al admitir la cúpula de ERC la enorme desconfianza que genera el PSC entre sus bases por la falta de incumplimientos y, además, por haber defendido la aplicación del artículo 155 en 2017.

Preparativos para el traspaso

Si el Parlament se prepara ya para la sesión de investidura, el traspaso empieza a abrirse paso en el Palau de la Generalitat. Tras la celebración del último Consell Executiu de este verano, el president Pere Aragonès hará este martes al mediodía una declaración en la Galería Gótica en la que probablemente se despedirá del cargo. Sus consejeros ya se están preparando para hacer el traspaso.

La vuelta de Puigdemont

Mientras se ultiman esos detalles, la vuelta de Puigdemont planea sobre el Parlament. Junts no ha desvelado los planes del expresident, pero todo apunta a que priorizará la opción de llegar a la Cámara y no la de un regreso rodeado de sus seguidores y de forma pública, como se había especulado. Rull pidió a primeros de julio al secretario general del Parlament, Albert Capelleras, revisar el protocolo de seguridad de la Cámara para ver si ofrece suficientes garantías para que Puigdemont pueda asistir al pleno sin ser detenido.

Impedimento a la detención

El también diputado de Junts siempre ha defendido que su voluntad política es la de impedir que la policía entre en la cámara para que no pueda practicar una detención. Jurídicamente, sin embargo, no está claro que pueda impedir que se ejecute la orden de arresto dictada por los jueces del Supremo.