Tener un gato te puede volver esquizofrénico, según un estudio

Según un estudio de la Universidad de Queensland, en Australia, tener un gato como mascota puede aumentar el riesgo de desarrollar esquizofrenia. La investigación, que analizó datos de 17 estudios realizados en 11 países durante 44 años, encontró que las personas que tienen gatos tienen el doble de probabilidades de padecer esquizofrenia o experimentar trastornos psicóticos.

¿Por qué los gatos pueden provocar esquizofrenia?

Los investigadores creen que el responsable es un parásito llamado Toxoplasma gondii (T. gondii). Este parásito se encuentra en los gatos domésticos y puede ingresar al sistema nervioso central de un humano a través de las mordeduras de gato o al ingerir carne cruda o poco cocida que contenga el parásito.

Una vez en el cerebro, el T. gondii puede afectar los neurotransmisores, provocando cambios de personalidad, esquizofrenia, delirios y alucinaciones.

¿Todos los gatos transmiten el T. gondii?

No todos los gatos transmiten el T. gondii. Solo los gatos que han cazado y comido roedores infectados con el parásito pueden transmitirlo a los humanos.

¿Cómo prevenir la infección por T. gondii?

Para prevenir la infección por T. gondii, es importante tomar las siguientes precauciones:

¿Qué hacer si me preocupa haber contraído el T. gondii?

Si le preocupa haber contraído el T. gondii, hable con su médico. Hay una prueba de sangre que puede detectar la infección.

Si se detecta la infección, su médico puede recetarle medicamentos para tratarla.