El Hierro llora el naufragio más letal en sus costas: "Se oían los gritos en plena noche"

El Hierro se encuentra de luto tras el trágico naufragio ocurrido en sus aguas, en el que han fallecido nueve personas y medio centenar continúan desaparecidas. El suceso ha conmocionado a la isla, que se encontraba inmersa en un fin de semana de celebración.

En la noche del viernes, una patrullera de Salvamento Marítimo y la embarcación Salvamar Adhara fueron alertadas de la presencia de un cayuco con al menos 84 personas a bordo, provenientes de Mali, Mauritania y Senegal. Tras seis días de navegación, el cayuco se encontraba a 7,5 kilómetros de la orilla de La Restinga, en El Hierro, sin agua ni comida.

Un rescate difícil

Las condiciones meteorológicas adversas, con noche cerrada y fuertes vientos, dificultaron el rescate. La Guardamar Concepción Arenal, con una eslora de 32 metros, se encontró con un barco escorado, lo que hacía presagiar que llevaba agua en su interior. Según los testimonios de los supervivientes, al ver la nave de Salvamento Marítimo, todos se agolparon en un costado, lo que pudo provocar el vuelco de la embarcación.

27 supervivientes y nueve fallecidos

La Salvamar Adhara, con una tripulación de tan solo cuatro personas, tardó media hora en llegar a la zona del naufragio y logró rescatar a 27 personas, entre ellas cuatro menores. También recuperaron nueve cadáveres, pero medio centenar de pasajeros fueron engullidos por el mar.

Búsqueda de desaparecidos

Durante todo el sábado, trabajaron en la zona tres helicópteros, además de varios buques de rescate y un destacamento de cuatro buzos. Sin embargo, las esperanzas de encontrar supervivientes son prácticamente nulas, según fuentes de la Guardia Civil.

La zona del naufragio tiene una profundidad de hasta 1.000 metros y las aguas son muy frías. Aun así, la búsqueda de cuerpos se mantendrá durante varios días.

Conmoción en la isla

El naufragio ha causado una profunda conmoción en El Hierro, una isla de apenas 11.000 habitantes. El alcalde, Alpidio Armas, ha decretado dos días de luto oficial y ha suspendido todas las actividades festivas.

La Cruz Roja y otras organizaciones humanitarias han activado sus protocolos de emergencia para atender a los supervivientes y a las familias de las víctimas. El Gobierno de Canarias ha enviado un equipo de psicólogos para brindar apoyo emocional a los afectados.

El suceso ha vuelto a poner de manifiesto el drama de la inmigración irregular en el archipiélago canario. En lo que va de año, más de 15.000 personas han llegado a las islas en pateras y cayucos, lo que supone un aumento del 50% respecto al mismo periodo del año anterior.