Una ola de vandalismo azota una calle de Usera: coches calcinados y pintados

Desde hace un mes, los vecinos del barrio Zofío, en el distrito Usera de Madrid, viven atemorizados por una oleada de vandalismo que se ceba con los vehículos estacionados en la calle Cerecinos. Cada mañana, los conductores se encuentran con sus coches pintados con espray, con las lunas rotas e incluso calcinados.

Sin pistas de los autores ni motivos

Nadie sabe quién está detrás de estos ataques, ni qué les motiva. Los afectados han denunciado los hechos ante la Policía Municipal y la Nacional, que están investigando sin resultados hasta el momento. Las pesquisas apuntan a que los vándalos podrían estar utilizando un soplete y líquido inflamable para prender fuego a los vehículos.

Una calle tranquila que se ha vuelto peligrosa

La calle Cerecinos es una vía tranquila, pero el vandalismo la ha convertido en un lugar peligroso. Los vecinos ya no se atreven a aparcar allí, aunque sea una zona de estacionamiento gratuito. Los pocos conductores que aún lo hacen, lo hacen con el temor de encontrarse su coche destrozado a la mañana siguiente.

Las cámaras de seguridad brillan por su ausencia

Una de las dificultades para esclarecer los hechos es la falta de cámaras de videovigilancia en la zona donde se han producido los incendios. Los vecinos llevan tiempo pidiendo al Ayuntamiento que instale cámaras, pero sus demandas no han sido atendidas.

El SER, ¿el detonante del vandalismo?

Algunos vecinos apuntan a que el vandalismo podría estar relacionado con la implantación del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) en zonas cercanas. Sin embargo, el presidente de la asociación Barrio Zofío niega esta posibilidad, ya que la calle Cerecinos es de estacionamiento gratuito. El Ayuntamiento de Madrid tampoco ha recibido quejas por la implementación del SER en las áreas colindantes.

Preocupación y miedo entre los vecinos

Los vecinos están cada vez más preocupados y temen que el vandalismo vaya a más. Exigen al Ayuntamiento que tome medidas para garantizar su seguridad y acabar con esta situación.

Mientras se investiga el caso, la Policía Municipal y la Nacional han desplegado un dispositivo conjunto con agentes de paisano y coches camuflados para intentar identificar a los culpables.