Vox reitera sus falsedades sobre delincuencia e inmigración en la campaña vasca
El partido ultra Vox continúa difundiendo datos falsos o manipulados en su campaña electoral para las elecciones al Parlamento vasco del próximo día 21. Dejando en un segundo plano cuestiones como la independencia o el terrorismo, Vox ha centrado su discurso en denunciar la supuesta invasión de Euskadi por parte de inmigrantes en situación irregular y el aumento de la delincuencia, que presenta como dos caras de la misma moneda.
Mentiras sobre la criminalidad
El líder de Vox, Santiago Abascal, ha asegurado que "en esta provincia han aumentado un 100% los robos con violencia en el último año". Sin embargo, según el balance de criminalidad del Ministerio del Interior, los robos con violencia e intimidación se redujeron un 11% en Bizkaia en 2023.
Abascal también ha afirmado que "en el último año han aumentado un 200% las violaciones en el País Vasco". Esta afirmación es falsa. Las agresiones sexuales con penetración se redujeron un 1,7% en el País Vasco el año pasado, según el balance de criminalidad de Interior.
Mentiras sobre la inmigración
Vox también acusa a los inmigrantes irregulares de acaparar las ayudas sociales en perjuicio de los nacionales. "El separatismo no ayuda a nuestros jóvenes, pero pone alfombra roja a los de fuera", ha dicho la única diputada de Vox en el Parlamento vasco, Amaia Martínez.
Sin embargo, según datos del Departamento de Trabajo y Empleo del Gobierno vasco, solo el 34% del total de beneficiarios de prestaciones de garantía de ingresos son extranjeros.
Vox ha llevado este asunto al pleno del Congreso, que este martes debatirá una moción que pide "establecer una prioridad nacional en las ayudas sociales y los programas de acceso a la vivienda". En su argumentación, el grupo ultra asegura que 182 millones de euros del presupuesto del Gobierno vasco para la RGI y la Prestación Complementaria de Vivienda "se destinarán a personas de origen extranjero". Lo que no dice es cuál es el monto total de esas partidas.
Según el departamento vasco de Trabajo y Empleo, en 2023 ascendió a 467,6 millones, por lo que la parte destinada a inmigrantes no llega al 40%.