La extorsión, un azote que no cesa en Colombia

Las autoridades colombianas están en alerta ante el creciente número de casos de extorsión en el país, un delito que afecta principalmente a personas, comerciantes y empresarios, quienes reciben llamadas telefónicas exigiendo dinero por parte de delincuentes que operan desde el interior de las cárceles.

A pesar de los controles y medidas implementadas, los delincuentes siempre encuentran formas de ingresar celulares a las prisiones, lo que les permite seguir delinquiendo desde sus celdas y afectar la tranquilidad de la ciudadanía.

Operativos de incautación para combatir la extorsión

Ante esta problemática, las autoridades han puesto en marcha planes de incautación para requisar estos dispositivos y evitar que los delincuentes continúen extorsionando desde sus lugares de reclusión.

El pasado sábado 3 de agosto, se llevó a cabo un operativo en las cárceles de Pedregal y Bellavista en Medellín, donde se encontraron 100 celulares, 20 armas blancas, 2 módems de internet, un reloj inteligente y estupefacientes.

Este hallazgo ha generado gran preocupación entre las autoridades, quienes se preguntan cómo ingresan estos elementos a las cárceles y quiénes colaboran con los delincuentes para facilitar su ingreso.

Medidas para proteger a la ciudadanía

El comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, General Óscar Lamprea, afirmó que estos operativos buscan proteger el patrimonio económico de las personas y prevenir delitos cometidos a través de llamadas telefónicas desde el interior de los centros penitenciarios.

Se espera que estas acciones contribuyan a reducir significativamente la cifra de delitos por extorsión en Medellín y Antioquia, y que la ciudadanía pueda recuperar la tranquilidad tanto en sus hogares como en sus negocios.