La Policía Metropolitana de Cali incauta 50 piezas de armas que iban a ser enviadas a criminales
En un operativo conjunto con la Policía Fiscal y Aduanera y la Oficina de Investigaciones del Departamento de Seguridad Nacional, la Policía Metropolitana de Cali logró interceptar un envío de aproximadamente 50 piezas de armas que iban a ser enviadas a grupos criminales.
Las piezas llegaron a Colombia a través de un correo postal urgente y fueron detectadas por los escáneres de seguridad de las autoridades aduaneras. Al identificar las piezas, los funcionarios iniciaron un plan de seguimiento y vigilancia para dar con los destinatarios finales del envío.
Allanamientos y capturas
El operativo incluyó dos allanamientos simultáneos. El primero se realizó en el barrio Terranova, en Jamundí, donde fue capturado un hombre de 18 años que había recibido la encomienda. En su interior, se encontraron siete alzas de mira para fusiles M4 y M16 de fabricación estadounidense.
El segundo allanamiento se llevó a cabo en una empresa de mensajería en el barrio Granada, en el norte de Cali. Allí, las autoridades incautaron un paquete que contenía otras 45 piezas, entre ellas, empuñaduras, disparadores, cerrojos, resortes recuperadores, varillas guías y cargadores para fusiles y pistolas.
Investigación en curso
Actualmente, la Unidad de Crímenes Trasnacionales, en coordinación con unidades de Inteligencia e Investigación Criminal, lleva a cabo una exhaustiva investigación para determinar la correlación de los hechos y combatir este peligroso fenómeno, llevando ante la justicia a las redes del crimen organizado.
Medidas judiciales
El hombre capturado fue puesto a disposición de la Fiscalía General de la Nación y un Juez de Control de Garantías le impuso medida de aseguramiento intramural por el delito de fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego, accesorios, partes o municiones.
Recomendaciones a la ciudadanía
Las autoridades recuerdan a la ciudadanía que adquirir, recibir, ocultar o aprovecharse de objetos provenientes de delitos contra el patrimonio económico promueve la cadena criminal del hurto y se considera una conducta punible, conocida como receptación.