El arte de Alexis Cañón, un fotógrafo bogotano de 39 años, explora los contrastes de luces y sentimientos, encontrando en los cementerios y paisajes oscuros su musa. Su lente capta la esencia de la tristeza, el vacío y la melancolía que rodean estos lugares, transformando lo insignificante en digno de ser resaltado.
Un viaje por el tiempo y las emociones
Con más de una década dedicada a la fotografía, Cañón lleva a sus espectadores por un viaje en el tiempo y las emociones. Su pasión nació en los cementerios, donde encontró historias ocultas entre las tumbas abandonadas. Inspirado por revistas y películas de terror, se aventuró a adquirir su primera cámara y a explorar estos espacios sagrados.
Los cementerios como portales de reflexión
Para Cañón, los cementerios son portales a la reflexión sobre la vida y la muerte. Su trabajo busca transmitir la solemnidad de la muerte a través de imágenes que capturan la belleza en lo sombrío y lo olvidado. Cada tumba y escena oscura se convierte en un lienzo para meditar sobre la existencia humana.
La música como fuente de inspiración
Además de los cementerios, la música, especialmente el rock y el heavy metal, también inspira a Cañón. A través de su lente, captura la energía y la rebeldía de estos géneros musicales, creando imágenes vibrantes y llenas de movimiento.
Un artista en constante búsqueda
Cañón es un artista en constante búsqueda. Su trabajo invita a reflexionar sobre la belleza que se esconde en los lugares más inesperados. Si bien no vive de la fotografía, es su pasión, lo que lo impulsa a seguir explorando nuevos caminos y compartiendo su visión única del mundo.
Legado y sueños
El trabajo de Cañón no solo es un testimonio de su talento artístico, sino también un valioso archivo histórico que documenta la evolución de los cementerios y la cultura funeraria en Bogotá y Colombia. Su legado perdurará en el tiempo, inspirando a nuevas generaciones de artistas a explorar la belleza en lo oscuro.
