Las lluvias en Antioquia azotan el departamento, dejando miles de damnificados

Las intensas precipitaciones que azotan al departamento de Antioquia han ocasionado graves estragos, afectando a numerosas familias y comunidades. Según el último reporte entregado por las autoridades de gestión del riesgo, más de 5.000 personas han resultado damnificadas y cerca de 12.000 han sido perjudicadas de diversas maneras.

La Gobernación de Antioquia mantiene un estrecho seguimiento a la situación, particularmente en los nueve municipios que han declarado la calamidad pública debido a las severas afectaciones por las lluvias: Betania, Buriticá, Cañasgordas, Chigorodó, Ituango, Peque, Sabanalarga, San Jerónimo y San Pedro de Urabá.

Preocupación en las subregiones de Urabá y Oriente

El director del Departamento Administrativo de Gestión del Riesgo (DAGRAN), Carlos Ríos, ha expresado su especial preocupación por las condiciones en las subregiones de Urabá y Oriente. En estas zonas, el DAGRAN ha desplegado todos sus recursos para prevenir y mitigar los riesgos asociados a las lluvias torrenciales.

Impacto en los cultivos

Ríos también ha hecho hincapié en la alarmante situación que enfrentan los cultivos de los pequeños y medianos productores en Antioquia. Las intensas lluvias han dañado miles de hectáreas de cultivos, afectando significativamente la economía local.

Recomendaciones para la población

A pesar de las miles de familias afectadas, las autoridades de Antioquia instan a la población a mantenerse alerta y tomar precauciones, ya que se prevé que el fenómeno de La Niña intensifique las lluvias en los próximos días.

Prevención y preparación frente a las fuertes lluvias

Los organismos de socorro recomiendan a la ciudadanía adoptar las siguientes medidas preventivas:

  1. Mantenerse informados sobre los pronósticos meteorológicos y las alertas emitidas por las autoridades.
  2. Identificar rutas de evacuación y zonas seguras en caso de emergencia.
  3. Evitar cruzar ríos o quebradas cuando el nivel del agua esté elevado.
  4. Limpiar y descolmatar canales y alcantarillas para prevenir inundaciones.
  5. Revisar y asegurar techos y estructuras para evitar daños por vendavales.

Las autoridades enfatizan la importancia de la colaboración ciudadana para enfrentar los retos derivados de las fuertes lluvias. Al seguir estas recomendaciones y trabajar juntos, podemos minimizar los riesgos y proteger a nuestras comunidades.