Madre de pastor asesinado en Aguachica desmiente vínculos de su hijo con 'La Diabla'

En medio de la consternación que sigue generando la masacre de la familia Lora Rincón en Aguachica, Cesar, la madre del pastor Marlon Lora, Ángela Barrera, ha alzado su voz para defender la memoria de su hijo y desmentir las acusaciones que lo vinculan con Zaida Sánchez, alias 'La Diabla', una figura del crimen también asesinada meses después del trágico suceso. La investigación continúa en curso, buscando esclarecer los motivos detrás de este lamentable hecho ocurrido el 29 de diciembre de 2024.

Barrera, en una entrevista concedida al programa ‘Bajo sospecha’ de Pulzo, ha expresado su indignación ante las versiones que circulan, negando categóricamente cualquier relación entre su hijo y 'La Diabla' o su pareja, alias 'El Calvo'. «Nunca jamás conocimos a ese señor. Nunca fue a la iglesia, ni el tal ‘calvo’ ese ni la tal ‘Diabla’, sí que menos», afirmó Barrera, visiblemente afectada. «Enredaron [el caso] porque hablaron de una cosa terrible. Qué pena escuchar a mucha gente supuestamente preparada, puros amarillistas, para dañar y enlodar el nombre de mi familia, de mi hijo. Eso no es cierto, él no estaba vinculado con nada de eso» (Ángela Barrera, citada en Pulzo.com, 2024).

La teoría del error y la búsqueda de justicia

Según la versión de Barrera, el ataque en realidad iba dirigido contra 'La Diabla' y sus acompañantes, y la familia Lora Rincón fue víctima de una trágica confusión. «Había dos hombres y dos mujeres ahí; un calvo que se parecía a mi hijo… Ellos [los sicarios] se equivocaron», explicó la madre del pastor.

La vinculación del pastor Lora con 'La Diabla' surgió a raíz de la presencia de esta última en el restaurante de Aguachica donde ocurrió la masacre. Una de las hipótesis iniciales apuntaba a que Sánchez se encontraba en la misma mesa que la familia Lora, convirtiéndose en el blanco principal de los sicarios. Aunque 'La Diabla' negó inicialmente cualquier implicación en el homicidio colectivo, su posterior asesinato desató una serie de revelaciones que complican aún más el panorama.

Mientras tanto, Ángela Barrera clama por justicia, exigiendo que se esclarezcan los hechos y se limpie el nombre de su familia. Ella subraya el impacto devastador que la masacre ha tenido en su vida y la importancia de restaurar la honra de sus seres queridos.

¿Qué se sabe hasta el momento de la investigación?

Las autoridades continúan investigando activamente para identificar y capturar a los responsables de la masacre. Se están analizando videos de seguridad, testimonios y otras pruebas forenses para reconstruir los hechos y determinar con precisión los motivos detrás del ataque. La comunidad de Aguachica, por su parte, sigue conmocionada y exige respuestas claras y contundentes.

Implicaciones y contexto del caso

Este caso pone de relieve la compleja situación de violencia que afecta a varias regiones de Colombia, donde la presencia de grupos criminales y la disputa por el control territorial generan un clima de inseguridad y zozobra. La masacre de la familia Lora Rincón es un trágico ejemplo de las consecuencias de esta violencia, que cobra vidas inocentes y deja un profundo dolor en la sociedad.

La exigencia de justicia por parte de Ángela Barrera se une al clamor de miles de familias colombianas que han sido víctimas de la violencia. Su testimonio es un llamado a la acción, a no permitir que este tipo de crímenes queden impunes y a trabajar por la construcción de una sociedad más justa y pacífica. El caso de la familia Lora Rincón sigue siendo un recordatorio doloroso de la necesidad de redoblar los esfuerzos para combatir la criminalidad y garantizar la seguridad de todos los ciudadanos.

La historia continúa desarrollándose mientras se esperan nuevos avances en la investigación y se busca la verdad detrás de este trágico suceso. La comunidad y los medios de comunicación están siguiendo de cerca cada detalle, con la esperanza de que se haga justicia y se pueda dar un cierre a este doloroso capítulo.