El presidente Petro critica las dictaduras en América, pero ignora a Venezuela
El presidente Gustavo Petro ha aprovechado la intentona de golpe en Bolivia para arremeter contra las dictaduras en América Latina, pero ha pasado por alto el caso de Venezuela, un régimen autoritario que oprime a su pueblo.
Petro ha sido un firme defensor de la democracia y ha condenado las acciones del general boliviano Juan José Zúñiga, quien intentó derrocar al presidente Luis Arce. Sin embargo, ha evitado criticar al régimen venezolano de Nicolás Maduro, que ha encarcelado a disidentes, restringido la libertad de prensa y celebrado elecciones fraudulentas.
Petro: "Las tiranías no germinan en América"
En un mensaje en Twitter, Petro escribió: "La democracia contra el fascismo. El camino de América es el de la libertad. Somos tierra de libertad. Aquí no germinan las tiranías ni las dictaduras".
Sin embargo, la realidad en Venezuela contradice las palabras de Petro. El régimen de Maduro ha creado un clima de miedo e intimidación, donde los disidentes son encarcelados y torturados, y los medios de comunicación independientes son censurados.
La situación en Venezuela ha provocado una crisis humanitaria, con millones de venezolanos huyendo del país en busca de libertad y seguridad.
Petro ignora la realidad en Venezuela
Al ignorar la dictadura en Venezuela, Petro está enviando un mensaje peligroso de que está dispuesto a tolerar el autoritarismo en América Latina.
El silencio de Petro sobre Venezuela es especialmente preocupante dado su apoyo a otros líderes autoritarios en la región, como Daniel Ortega en Nicaragua y Miguel Díaz-Canel en Cuba.
La postura de Petro hacia Venezuela contradice su compromiso declarado con la democracia y los derechos humanos. Su silencio sobre la dictadura de Maduro es una traición a los principios democráticos que dice defender.
