Robo audaz en restaurante bogotano: Un Rolex falso el botín inesperado

En una tranquila tarde de domingo, el barrio Santa Bárbara de Bogotá se vio irrumpido por la acción de dos ladrones en motocicleta que, con arma en mano, perpetraron un robo sorpresivo a plena luz del día. El lujoso restaurante Abasto, situado en la carrera 5 con calle 118, estaba repleto de comensales cuando uno de ellos, ubicado cerca de la puerta y disfrutando de su almuerzo, fue abordado sin previo aviso. Lo que parecía un valioso reloj Rolex en su muñeca se convirtió en el objetivo de este hurto, dejando a los presentes en un estado de asombro y confusión.

El robo, que ocurrió aproximadamente a las 4:24 de la tarde, fue ejecutado de manera rápida y sin mediar palabras. Los atacantes, aprovechando la distracción del cliente y la afluencia del establecimiento, actuaron con una precisión y frialdad que apenas permitió reacción por parte de los testigos. Pero lo que los malhechores no esperaban era que el reloj Rolex por el que arriesgaron su libertad no era más que una réplica valorada en medio millón de pesos colombianos.

Reacciones y medidas de seguridad tras el asalto

Luego de confirmarse el valor del bien hurtado, sorpresivamente, la víctima identificada solamente como Javier, decidió no interponer denuncia ante las autoridades, abandonando cualquier pretensión legal. La Policía Metropolitana de Bogotá, no obstante, no ha cejado en sus esfuerzos por recolectar información y llevar a cabo la búsqueda de esos responsables del inusitado robo, que ha generado alarma sobre la seguridad pública en sectores de alta gastronomía y esparcimiento de la ciudad.

Este evento se suma a una cadena de robos que han suscitado recientemente en Bogotá, poniendo en tela de juicio las medidas de seguridad en zonas que se presumían seguras y dejando en claro que ni la luz del día ni la reputación de un sitio garantizan la tranquilidad de los bogotanos.

¿Qué dice el balance de seguridad en Bogotá?

El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, enfrenta el desafío de la inseguridad ciudadana, una de las principales preocupaciones de sus gobernados y punto clave abordado durante su campaña electoral. Las últimas cifras divulgadas hablan de un descenso en las estadísticas de homicidios, un 23% menos en comparación con el año anterior. Sin embargo, el número de hurtos a personas sigue siendo alarmantemente alto, incluso con una reducción del 20% en las denuncias según las cifras de la administración local.