La polémica en los Juegos Olímpicos: Una boxeadora trans enfrenta un debate sobre ventaja física

Los Juegos Olímpicos se han visto sacudidos por una polémica después de que la boxeadora italiana Natalia Carini perdiera su pelea en tan solo 45 segundos contra la argelina Imane Khelif, quien fue descalificada del Mundial de Boxeo de 2023 por tener cromosomas XY, típicamente masculinos.

Opiniones encontradas

Javier Milei, conocido por su postura conservadora, ha expresado su descontento con la participación de boxeadoras trans en los Juegos. Argumenta que las ventajas físicas de los hombres, como la mayor potencia y el tamaño, les dan una ventaja injusta.

Por otro lado, los defensores de los derechos trans sostienen que las atletas trans deben ser elegibles para competir en base a su identidad de género y que las preocupaciones sobre las ventajas físicas son exageradas.

Investigaciones científicas

Según estudios científicos, la potencia promedio de un hombre que ha atravesado la pubertad es un 162% mayor que la de una mujer. Esta diferencia podría proporcionar una ventaja significativa a atletas como Khelif y Yu-Ting, otra boxeadora trans que participa en los Juegos.

Antecedentes

El caso de Khelif no es el primero de este tipo en los Juegos Olímpicos. La taiwanesa Lin Yu-Ting, también descalificada del Mundial de Boxeo 2023 por tener cromosomas XY, recibió luz verde para participar en los Juegos por parte del Comité Olímpico Internacional.

La controversia pone de relieve los complejos problemas que rodean la participación de atletas trans en los deportes y plantea preguntas sobre equidad y ventaja física.