Abogado Sergio Ramírez niega vínculos con "El Mayo" Zambada y figuras políticas

Sergio Ramírez, socio de uno de los abogados del Cártel de Sinaloa, está rechazando enérgicamente las acusaciones que lo vinculan con Ismael «El Mayo» Zambada y prominentes figuras políticas mexicanas. En una entrevista exclusiva con Alejandro Domínguez para MILENIO Televisión, Ramírez está insistiendo en que no tiene conocimiento del proceso legal que enfrenta Zambada y que su relación con el caso es inexistente. «Yo en el asunto del señor Ismael Zambada me enteré el día sábado», afirmó Ramírez durante la entrevista (Redacción, 2025).

Ramírez aclara su relación con el bufete legal

El abogado está explicando que su sociedad con Juan Pablo Penilla y Juan Manuel Delgado González, involucra solo unos pocos casos dentro de su despacho, el cual maneja más de 200 asuntos legales. Ramírez está enfatizando que su asociación con los abogados mencionados no lo convierte en representante legal de Zambada. «Por ese simple hecho de un señalamiento de un socio ya me consideran abogado de una persona que yo no soy», argumenta (Redacción, 2025).

Desvinculación con AMLO y Sheinbaum

Además de negar su participación en el caso de Zambada, Ramírez también está desmintiendo cualquier conexión directa con el expresidente Andrés Manuel López Obrador y la actual Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum. Si bien admite haber tenido cercanía con el movimiento Morena desde 2018, Ramírez está asegurando que nunca ha tenido contacto directo con ninguno de los dos políticos ni con el gabinete de seguridad de Sheinbaum (Redacción, 2025).

Acusaciones de orquestación política

Ramírez está sugiriendo que las acusaciones en su contra son parte de una estrategia política orquestada por la oposición, específicamente el Partido Acción Nacional (PAN), para crear una narrativa falsa que lo vincula con el crimen organizado. El abogado está argumentando que estas acusaciones buscan desprestigiarlo y empañar su trayectoria profesional de 26 años (Redacción, 2025).

Propuesta de diálogo entre gobierno y crimen organizado

Un punto central de la controversia es la propuesta de Ramírez de que los abogados de narcotraficantes actúen como intermediarios en el diálogo entre los grupos criminales y el gobierno. El abogado está defendiendo su postura y argumentando que México está perdiendo oportunidades al no utilizar figuras como la del testigo colaborador, una herramienta que, según él, se utiliza con éxito en Estados Unidos (Redacción, 2025). «Cuando alguien se declara culpable, entonces se vuelve testigo colaborador del Estado americano, repara del daño al Estado americano y acá no estamos aprovechando esas figuras, aquí estamos perdidos», declara Ramírez, defendiendo su controvertida propuesta (Redacción, 2025).

Rechazo al término «narcoabogado»

Ramírez está expresando su descontento con el término «narcoabogado», calificándolo de «terrible». El abogado está destacando su trabajo pro bono con mujeres víctimas de violencia y abuso sexual, y está presentando su trayectoria como defensor de los derechos humanos para contrarrestar la imagen negativa que se está proyectando de él (Redacción, 2025).

Contexto y análisis

Esta controversia está poniendo de manifiesto el complejo panorama legal y político que rodea al crimen organizado en México. La propuesta de Ramírez, si bien busca generar un diálogo para la pacificación del país, está generando un intenso debate sobre los límites éticos y legales de la abogacía en casos relacionados con el narcotráfico.

«No soy abogado de Ismael Zambada, y si lo fuera tampoco entendería cuál fuera el problema», afirma Ramírez, desafiando las acusaciones en su contra (Redacción, 2025).

El debate continúa y la opinión pública está dividida. Mientras algunos ven en Ramírez a un abogado defensor de los derechos humanos, otros lo perciben como un facilitador del crimen organizado. El tiempo dirá cuál será el desenlace de esta controversia y cómo impactará en la lucha contra el narcotráfico en México.