“Me Gusta ir a la Boquería y Perderme en el Raval”

Andreu Casasnovas, director general de Sony España, comparte su visión sobre la creatividad y el liderazgo en una entrevista con María Fernández para El País.

Ingeniero de Telecomunicaciones, de 47 años, con un MBA y formación de posgrado, Andreu Casasnovas lleva toda su vida profesional en Sony, donde ha dirigido el área de audio y vídeo a nivel europeo. Desde 2022 se encarga del negocio en España y Portugal.

De la Medicina a las Telecomunicaciones

Casasnovas inizialmente aspiraba a ser médico, pero su padre le sugirió considerar la larga y exigente formación que implicaba esa carrera. En ese momento, las telecomunicaciones estaban en auge, por lo que decidió cambiar de rumbo.

Ambición y Progresión

Casasnovas se considera una persona ambiciosa, pero prefiere progresar de forma natural y constante en lugar de dar saltos bruscos. A los 23 o 24 años, tuvo la oportunidad de conversar con el director general de Sony y expresó su aspiración de ocupar su puesto en el futuro, lo cual finalmente logró.

Fomento de la Creatividad

En su cargo actual, Casasnovas quiere fomentar la creatividad, aunque reconoce que él mismo no es una persona creativa. Sin embargo, valora a quienes lo son y busca apoyarlos aportando realismo y estructura a sus ideas.

Equilibrio entre el Trabajo y la Vida Personal

Casasnovas se esfuerza por mantener un equilibrio entre su vida profesional y personal. Disfruta de actividades como la música, el cine y el deporte, y prioriza el tiempo de calidad con sus hijos.

Los fines de semana, suele hacer de taxista para sus hijos adolescentes y aprovecha para ir al mercado de la Boquería, perderse por las calles del Raval y ayudar a sus hijos con sus estudios.

Inquietudes Personales

Casasnovas expresa su preocupación por el olvido de importantes acontecimientos, como la guerra de Ucrania, y enfatiza la importancia de recordar las guerras para evitar que caigan en el olvido.

También reflexiona sobre la adolescencia de sus hijos y la importancia de la escucha activa, la flexibilidad y el reconocimiento de su evolución responsable.

Finalmente, Casasnovas se considera una persona feliz y afortunada.