¿Logrará Banco Santander superar los seis euros por acción?

El gigante bancario español, Banco Santander, ha cerrado el año 2024 con unos resultados récord, pero con el mismo beneficio por acción que en 2005. Este hecho ha generado dudas entre los analistas y los inversores sobre las perspectivas de crecimiento de la entidad.

Un beneficio por acción estancado

En 2024, Banco Santander obtuvo un beneficio neto de 13.240 millones de euros, un 112% más que en 2005. Sin embargo, este aumento no se ha traducido en un mayor beneficio por acción (BPA), que se ha mantenido en los 0,87 euros. Esta situación se debe a las ampliaciones de capital realizadas por el banco en los últimos años, que han diluido el valor de las acciones.

  • 2005: BPA de 0,87 euros, beneficio neto de 6.220 millones de euros.
  • 2024: BPA de 0,87 euros, beneficio neto de 13.240 millones de euros.

Un rendimiento total atractivo

A pesar del estancamiento del BPA, el rendimiento total de Banco Santander en los últimos 20 años ha sido del 99%, teniendo en cuenta los dividendos. Esto supone un retorno anual del 3,5%, por debajo del 7,41% del índice Stoxx 600, pero por encima del 2,04% anual del índice Stoxx 600 bancario.

Esto indica que, si bien el precio de las acciones de Santander no ha crecido significativamente en los últimos años, los dividendos pagados han proporcionado a los accionistas un rendimiento satisfactorio.

El reto de la dilución

El principal reto al que se enfrenta Banco Santander es la dilución del BPA debido a las ampliaciones de capital. Estas ampliaciones son necesarias para que el banco pueda seguir creciendo, pero también tienen un impacto negativo en el valor de las acciones de los accionistas existentes.

Para mitigar este efecto, Banco Santander ha llevado a cabo una política de dividendos generosa, lo que ha ayudado a compensar la dilución del BPA. Sin embargo, el banco tendrá que encontrar un equilibrio entre el crecimiento y el mantenimiento del valor para los accionistas.

El futuro de Banco Santander

El futuro de Banco Santander depende de su capacidad para seguir creciendo y manteniendo un BPA estable. El banco se enfrenta a un entorno competitivo cada vez más complejo, con la entrada de nuevos actores como las fintechs y los neobancos.

Sin embargo, Banco Santander cuenta con una sólida base de clientes, una amplia presencia internacional y una sólida cultura corporativa. Estos factores le sitúan en una buena posición para superar los desafíos y seguir siendo un actor relevante en el sector bancario mundial.