Para los inversionistas extranjeros, las dos candidatas presidenciales en México poseen suficientes puntos en común para asegurar la continuidad, según Raúl Martínez Ostos, director general del banco inglés Barclays. Los inversionistas se preocupan principalmente por las finanzas públicas saludables del país y su sólida macroeconomía.

Inversionistas extranjeros ven con optimismo el escenario electoral

Martínez, quien también es vicepresidente de la Asociación de Bancos de México (ABM), advierte sobre la iniciativa del partido del presidente Andrés Manuel López Obrador de incorporar las cuentas de ahorro para el retiro inactivas (Afores) a un fondo para financiar las nuevas pensiones, un componente de sus programas sociales.

Perspectivas ante la contienda electoral

Las candidatas punteras, aunque con visiones ideológicas opuestas, comparten preocupaciones sobre la estabilidad macroeconómica, incluidas unas finanzas públicas sólidas, un banco central autónomo enfocado en controlar la inflación y unas cuentas externas bien administradas. También coinciden en la importancia del Estado de derecho y la seguridad.

A diferencia de las elecciones de 2018, cuando existía el temor de un giro hacia la izquierda radical que alejara al país del sector privado, los inversionistas ahora perciben una relativa estabilidad en los últimos seis años. El escenario de que el partido gobernante permanezca en el poder otros seis años se considera neutral o positivo. Incluso si la oposición gana, se espera que implemente políticas favorables al mercado.

Impacto de las elecciones en Estados Unidos

Martínez considera que los inversionistas están más atentos a las elecciones de Estados Unidos y su posible impacto en México, aunque aún es temprano para evaluar su repercusión.

El nearshoring en México: ¿Se está materializando?

Si bien hay señales contradictorias sobre la llegada del nearshoring a México, Martínez se mantiene optimista. Inicialmente, las empresas se han enfocado en consolidar la reinversión, pero espera que las empresas con cadenas de suministro establecidas en el país amplíen sus operaciones.

Martínez cita la oferta pública inicial de la empresa mexicana Vesta en Nueva York como un ejemplo del fuerte apetito de los inversionistas extranjeros por las empresas mexicanas vinculadas al nearshoring. Para satisfacer esta demanda, se requiere una mejora en la infraestructura energética, de agua y logística, un aspecto que según Martínez es reconocido tanto por las candidatas como por el candidato.