El Gobierno critica al G20 y firma el documento final en disidencia con la Agenda 2030

El Gobierno argentino criticó al G20 y celebró haber firmado el documento final en disidencia con la Agenda 2030. A través de un comunicado, argumentaron que "desde hace tiempo que está en falta" con el "propósito original" del grupo.

Pasada la primera jornada de la Cumbre del G-20 de Río de Janeiro, el Gobierno anunció que, por primera vez desde que es parte del grupo, firmó la declaración de presidentes en disidencia parcial de "todo el contenido vinculado a la Agenda 2030".

A través de un comunicado, la administración de Javier Milei argumentó que estos organismos y foros internacionales se crearon para "cooperar de forma voluntaria, en calidad de iguales y autónomas, para, entre otras cosas, salvaguardar los derechos básicos de las personas". Sin embargo, advirtió que "desde hace tiempo que está en falta con su propósito original".

"Es por ello que, sin obstaculizar la declaración de los demás líderes, el Presidente Javier Milei ha dejado en claro en su participación del G-20 que no acompaña varios puntos de la declaración, entre ellos; la promoción de la limitación de la libertad de expresión en redes sociales, el esquema de imposición y vulneración de la soberanía de las instituciones de gobernanza global, el trato desigual ante la ley y especialmente, la noción de que una mayor intervención estatal es la forma de luchar contra el hambre".

"El G-20 se ha convertido en un foro donde se imponen agendas ideológicas y se vulneran los principios de soberanía y no intervención", señaló el comunicado.

La postura del Gobierno argentino se suma a las críticas que otros países, como Brasil y México, han hecho al G20 en los últimos años. Estos países argumentan que el grupo se ha alejado de su propósito original y se ha convertido en un foro donde se imponen agendas ideológicas.

La Agenda 2030

La Agenda 2030 es un plan de acción adoptado por los países miembros de las Naciones Unidas en 2015. El plan establece 17 objetivos de desarrollo sostenible, entre los que se incluyen la erradicación de la pobreza, el hambre y la desigualdad.

El Gobierno argentino ha expresado su apoyo a la Agenda 2030, pero también ha manifestado su preocupación por algunas de sus disposiciones. En particular, el Gobierno ha criticado la promoción de la limitación de la libertad de expresión en redes sociales y la noción de que una mayor intervención estatal es la forma de luchar contra el hambre.

Las implicaciones de la disidencia argentina

La disidencia argentina con la Agenda 2030 es un paso significativo. Señala que el Gobierno argentino no está dispuesto a aceptar todas las disposiciones de la agenda y que está dispuesto a defender sus propios intereses.

La disidencia argentina también podría tener implicaciones para el futuro del G20. Si otros países siguen el ejemplo de Argentina, el grupo podría volverse menos eficaz a medida que los países se vuelven más reacios a comprometerse con agendas comunes.