El peso mexicano continúa fortaleciéndose frente al dólar estadounidense, acumulando dos jornadas consecutivas de ganancias. Este miércoles, la divisa mexicana cerró cotizando alrededor de 20.12 pesos por dólar, lo que representa una apreciación de 0.2% o 4 centavos respecto al cierre del martes.
Apreciación sostenida
La apreciación del peso se atribuye a la consolidación de las expectativas en el mercado sobre un próximo recorte de la tasa de interés por parte de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). Los analistas esperan que la Fed reduzca su tasa de interés en 25 puntos base el 18 de diciembre, en línea con la reciente desaceleración de la inflación en Estados Unidos.
Gabriela Siller, directora de análisis económico y financiero de Grupo Base, destacó que la inflación en Estados Unidos para noviembre se ubicó en 2.75% anual, en línea con las previsiones del mercado.
"El mercado está descontando un recorte de la tasa de interés por parte de la Fed, lo que está impulsando la apreciación del peso", afirmó Siller.
Fortalecimiento generalizado
El peso mexicano no fue la única divisa emergente que se fortaleció este miércoles. Otras monedas de economías emergentes o países productores de materias primas también experimentaron ganancias, entre ellas el real brasileño, el rublo ruso y el peso chileno.
El mercado de valores también cerró con ganancias generalizadas en todo el mundo, con la notable excepción del índice Dow Jones, que experimentó una ligera caída.
En México, el Índice de Precios y Cotizaciones (IPC) de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) registró una ligera pérdida del 0.18%, marcando dos sesiones consecutivas de descensos.
Implicaciones para México
La apreciación del peso mexicano tiene implicaciones positivas para la economía del país. Un peso más fuerte reduce el costo de las importaciones, lo que puede ayudar a controlar la inflación.
Además, un peso más fuerte puede atraer inversiones extranjeras, ya que hace que sea más atractivo para los inversores invertir en México.
Conclusión
El peso mexicano continúa fortaleciéndose frente al dólar estadounidense, impulsado por las expectativas de un recorte de la tasa de interés por parte de la Fed. Esta apreciación tiene implicaciones positivas para la economía mexicana, ya que puede ayudar a controlar la inflación y atraer inversiones extranjeras.