El plan fiscal enviado por el Gobierno a Bruselas confía en la incorporación de migrantes al mercado
El Gobierno de España ha enviado a Bruselas un plan fiscal que prevé la incorporación de migrantes al mercado laboral como uno de los pilares para el crecimiento económico. El plan, que ha sido elaborado en el marco de la estrategia económica del Gobierno, contempla la creación de más de 1,5 millones de puestos de trabajo adicionales hasta 2026, lo que supondría un nuevo récord de ocupación con un número total de ocupados que rozaría los 23 millones de personas.
La inmigración, clave para el crecimiento económico
El Gobierno considera que la inmigración es un factor clave para asegurar la sostenibilidad del crecimiento económico y la cohesión social en España. En este sentido, el plan fiscal señala que "las áreas de inmigración y vivienda son pilares clave para asegurar la sostenibilidad del crecimiento económico de España y la cohesión social. Su impacto en el potencial de crecimiento hace necesario incorporarlas en este Plan como pilares de la política económica en los próximos años".
El plan fiscal prevé una serie de reformas para facilitar la incorporación de migrantes al mercado laboral. Entre ellas, se encuentra la aprobación de un nuevo reglamento de la ley de extranjería y una revisión del sistema para homologar los títulos de foráneos. Estas reformas, según los cálculos del Ministerio de Economía, permitirán aumentar el crecimiento tendencial de la economía en tres décimas de aquí a 2031, al contar con más trabajadores y facilitar que estos estén más formados.
Reforma del reglamento de extranjería
La reforma del reglamento de la ley de extranjería tendrá dos patas principales. La primera es "mejorar las vías que permitan una mayor regularización del stock de inmigrantes existente, lo que permitiría aflorar la economía sumergida de los inmigrantes que no cumplen con los criterios de arraigo y evitando que el tránsito hacia el mercado laboral se produzca a través de vías colaterales no pensadas para dicho objetivo, como la figura de la solicitud de protección internacional".
La segunda pata es "revisar las diferentes figuras que permiten la contratación en origen y poder maximizar el potencial económico de los inmigrantes".
Además de estas reformas, el Gobierno también pretende incrementar la productividad de la población inmigrante, reconociendo de forma más ágil y flexible sus cualificaciones y competencias, en especial las universitarias.
El papel de la inmigración en el crecimiento económico
La inmigración está jugando un papel cada vez más determinante en el crecimiento económico de España. El 90% del aumento de la población activa en los últimos años se explica por la llegada de trabajadores extranjeros. De hecho, la creación anual de empleo inmigrante es mayor que entre 2000 y 2008, en plena burbuja inmobiliaria.
El presidente de la patronal de la construcción, Pedro Fernández Alén, ha advertido en numerosas ocasiones de que hacen falta trabajadores tanto para poder construir vivienda al ritmo que se necesita, como para poder desarrollar las inversiones de los fondos europeos.
Un informe del BBVA alertaba la semana pasada de que la inversión en vivienda nueva era insuficiente y que la oferta de vivienda estaba condicionada por la incertidumbre regulatoria, la falta de suelo, el escaso presupuesto público, el menor tamaño de las empresas del sector y la necesidad de crédito. El informe concluía que, incluso si se solventaran todos estos problemas, en cualquier caso no habría mano de obra suficiente para construir lo que se precisa.