La apuesta por los vehículos eléctricos se replantea ante la debilidad del mercado
El mercado de los coches eléctricos está experimentado una ralentización que está obligando a los fabricantes a replantear sus millonarias inversiones en este sector. En Estados Unidos, Ford ha anunciado que cancelará el lanzamiento de un SUV eléctrico de tres filas de asientos, retrasará la llegada de una camioneta eléctrica y reducirá sus inversiones en electrificación.
Ford da marcha atrás en su estrategia de electrificación
El fabricante estadounidense ha comunicado que reducirá sus inversiones en electrificación del 40% al 30% de sus inversiones anuales. Esta decisión se debe a que las ventas de coches eléctricos no están respondiendo a las expectativas y a que las inversiones necesarias para hacer posible el cambio a la electrificación son muy elevadas.
Ford estima que su división de coches eléctricos le dejará unas pérdidas de 5.500 millones de dólares este año. Además, la cancelación del SUV eléctrico supondrá unos costes adicionales de 1.900 millones de dólares.
Los competidores chinos presionan con precios más bajos
Además de la debilidad del mercado, Ford también está siendo presionada por los competidores chinos, que ofrecen coches eléctricos a precios más bajos. El objetivo de Ford es poder ofrecer coches eléctricos a precios similares a los de combustión para el año 2027.
Las acciones de Ford suben tras el anuncio
A pesar de las noticias sobre el replanteamiento de su estrategia de electrificación, las acciones de Ford han subido un 1,59% en las negociaciones previas a la apertura de Wall Street. Este aumento de valor puede deberse a que los inversores confían en que la nueva estrategia de Ford le permitirá mejorar su rentabilidad.
¿Qué impacto tendrá el replanteamiento de Ford en el mercado de los coches eléctricos?
El replanteamiento de Ford es una señal de que el mercado de los coches eléctricos no está creciendo tan rápido como se esperaba. Esto podría tener un impacto negativo en las inversiones en este sector y en el desarrollo de nuevos modelos.
Sin embargo, también es posible que el replanteamiento de Ford anime a otros fabricantes a reconsiderar sus propias estrategias de electrificación y a centrarse en la rentabilidad.